Me acaban de llamar de la luna, contestar un número desconocido
Creo que esa es la pregunta que todos nos hacemos en el tiempo que está sonando el teléfono y es una llamada de alguien que no conocemos, contestar un número desconocido, esa es la cuestión. A veces el nerviosismo de recibir una sorpresa o una mala noticia, nos hace contemplar el teléfono, mientras en esos segundos que timbra el móvil, nos preguntamos si deslizamos la barra verde para contestar o simplemente lo dejamos sonar.
Que por cierto, yo siempre me pregunte, para que carajos está el botón de cancelar, en serio, neta, para que fregados lo pusieron; digo, la misma función tiene dejarlo sonando, eventualmente la otra persona al otro lado de la línea se dará cuenta que no le quieres contestar, entrará el buzón y dejará su mensaje. Pero bueno, yo soy medio lenta y requería que me explicarán la útil función de ese botón; y esta radica en cuando quieres colgar inmediatamente una llamada, digo, el impacto que tiene en la otra persona que entre la grabación “el usuario que buscas no te quiere contestar” a que timbre, timbre y timbre. Además, si estas en un lugar en el que no quieres recibir otra llamada, simplemente no hay nada como cancelar llamada.
Entonces creo que sí, sí tiene una gran función ese botón. Pero cuando alguien que no conoces te llama, hace que dudes entre contestar, dejarlo sonar o colgar la llamada y entre más raro sea el número telefónico, más lo piensas. No sé tú, pero a mí me agobian sentimientos encontrados.
Tengo que reconocerlo, yo soy de esas personas que entra en pánico cuando un teléfono descocido aparece en la pantalla de marcación; no sé por qué, pero el hecho de estar frente a un peligro potencial al contestarle la llamada a un desconocido me hace entrar en pánico.
Bueno, tanto así como un potencial peligro, pues la neta no, hasta que existan las llamadas que tele transportan personas, pues hasta ese momento no hay mucho peligro, pero ahora con tantos fraudes y llamadas de extorsión de personas que no conoces, me hace dudar al contestar un teléfono que no conozco; aunque por otro lado podrían ser buenas noticias, podría ser un amigo perdido en el tiempo que quiere reestablecer contacto, podría ser una propuesta de trabajo, alguna recomendación o alguien que quiere conocer a la blogger más loca de México. Esas cosas contradictorias surgen en mi mente de manera impaciente, contestar o no contestar, será acaso que al contestar un número desconocido reciba una gran sorpresa.
¿Será?
Creo que lo más interesante de ese debate es la curiosidad, es la duda de saber qué es lo que hay detrás de esa llamada, como la paradoja de Schrödinger, lo más emocionante está en dejar sonar el teléfono y no en contestar un número desconocido.
Definitivamente eso es lo más emocionante, de cuando un número “desconocido” o extraño llama a mi celular, las expectativas, la emoción y las dudas que hay por esos breves segundos; duda que se convierta en eterna cuando no contesto esa llamada. Digo, si contestara hola y me dijeran, número equivocado, eso sería decepcionante, pero al no contestar siempre tendré la duda de ¿Quién me habrá llamado de un número tan extraño?, ¿Qué es lo que quería?
Y esa llamada me dejo pensando, porque era un número extraño, lo lógico sería pensar que ese teléfono de casi 20 dígitos, no debe ser una llamada hecha de este planeta, debe ser la luna o marte, pero confieso que no conteste porque no sabía si era por cobrar o no.
Nunca había visto un número tan largo y sin códigos o prefijos, tal vez no sea llamada de otro planeta, tal vez sea una llamada de la Matrix, no sé, siempre tendré la duda por no contestar un número desconocido.