Y tú, ¿ya besaste la #BotellaCocaCola?

De esos momentos awkwards del día, cuando tu vida romántica es nula, pero decir nula es mucho, de esas temporadas que tienes tanto sin tocar otros labios, que cualquier pregunta que tenga que ver con besar algo, hace que te proyectes y reacciones muy mal; así en plan bien neurótico gritando que morirás sola, amargada, sin ser tocada por el calor de un hombre, impaciente y esperando a que te hagan vibrar, jajajajajajajajaja.

Sí, lo juro, es verídico, cuando tienes mucho tiempo solo, sin amor, sin contacto con otra persona, terminas proyectando todo tipo de ideas del tipo neurótico, y sobre todo dramático.
Aunque bueno yo no reacciono violentamente, solo lo pienso, normalmente solo hago cara “que graciosa/o” y digo, NO, NO ME HAN HECHO EL FAVOR, perdón, corrijo, no, no me ha besado nadie, es más, ni siquiera mi perro quiero hacerlo últimamente, supongo que agarrarlo a abrazos y besos, en la búsqueda de amor, hace que últimamente no le agraden mucho mis besos; pero soy muy polite, así que simplemente digo que no.

Aunque es buena idea, eso de besar una botella de Coca-Cola, digo, así por lo menos tendré un poco de acción refrescante y burbujeante; por lo menos algo tocaron mis bellos y sensuales labios, que ansían con ganas y mucha pasión el ligero toque de unos labios, para expresar la máxima emoción que una persona pueda sentir en un tierno y cálido beso; esos besos que no solo te roban el aliento, sino que de apoco te roban el alma.

De esos besos ya no hay para mí, así que puedo ponerme a llorar, a hacer una manifestación de una persona en Reforma, o puedo hacer lo que las personas normales hacen cuando sus sueños de amor se truncan, puedo proyectarme y cada que alguien haga una pregunta relativamente relacionada con el tema, en este caso de los besos, yo me proyecte con ganas de contestarle a esa persona:

No, no, no me he besado con nadie desde hace muchísimos años, feliz, ni siquiera la Coca-Cola me quiere besar, ¡Feliz!

jajajajajajajaja, que no es el caso debo decir, pero estos días todo el mundo pareciera hablar de besos, esos besos que roban el aliento, que inspiran y que tienen algo que decir; es más, hasta la Coca-Cola ha tenido más suerte que yo, y se ha besado con más personas.

Y tú, ¿ya besaste la #BotellaCocaCola?

https://youtu.be/WGdDtJpAhJM

Y el día de hoy, todo se trató o fue relativo a los besos, esos besos que se roban, los besos que se dan, los besos que no se dan pero se desea hacerlo, esos besos que matan de la envidia, los besos que inspiran, los besos que alegran, los besos que hablan de amor sin hacerlo, los besos que hablan de deseo y cachondeo; es curioso, pero en el momento en el que tienes cero posibilidad de vivir en una vida llena de besos, ese es el día en el que todos hablan de eso, en el que todos preguntan cuantos besos has dado o si ya cumpliste tu ración básica del día.

Supongo que en vez renegar por la falta de suerte, amor y besos, supongo que a veces es mejor tomar una Coca-Cola, bien fría, en un día caluroso como hoy y tomártelo todo con calma.
Seguro habrá quien tenga muchos besos el día de hoy, pero esas personas presumidas, no tienen mi Coca-Cola, oh, rayos, a quien engaño, todos pueden tener una Coca-Cola.

En momentos como este, normalmente terminaría con un sarcasmo al siguiente estilo “que alguien me mate”, pero no quiero morir, solo quiero un beso, así que por favor “que alguien me bese”.