Filosofando

Ámame u ódiame, así de fácil

Pero si me odias porfa no me lo digas que siento feíto, pues claro yo también tengo mi corazoncito, soy algo difícil, pero obvio yo también siento feo, no soy de piedra.

Aunque sería bueno no lo creen, poder evolucionar a entes perfectamente intelectuales y cero emocionales. Ya saben una especie de robot inteligente diseñado biomecanicamente. No sé si al estilo Robocop o como Terminator, aunque finalmente desarrollaron emociones, ¡Que carajo fue eso!, ya eran robots y de un momento a otro eran más sensibles y cursis que la fregada. Ok, corrijo la cosa sería evolucionar como Hulk.

Me he puesto a pensar que nadie es monedita de oro para agradarle a todo el mundo, y mucho menos yo, sobre todo cuando tienes una actitud sin vergüenza y te jactas de ser medio cínico; pero lo que no se han puesto a pensar las personas, es que aquellos que nos escondemos tras una actitud arrogante somos las personas que más miedo tenemos a que nos hieran o lastimen; sí, algo curioso, parece ser que nosotros que somos más insensibles ciertamente somos más sensibles que el resto de la población, como reza el dicho “ámame cuando menos lo merezca, porqué será cuando más lo necesite”.

Y es que todos buscamos la aceptación de nuestro circulo social inmediato y el no tan inmediato, aunque lo neguemos, buscamos y rebuscamos formas para encontrar no solo aprobación y aceptación, sino reconocimiento social, algunos más extremo que otros, pero no solo es buscar la aceptación o encajar en los roles que la sociedad nos diseño, algunos queremos encajar de una manera particular, una manera diferente en la que fuimos diseñados.

“Ámame u ódiame” ¿no es tan fácil o sí?, pero siempre es preferible generar cualquier tipo de emoción ya sea positiva o negativa a tener una respuesta neutral o de indiferencia. Genera un mayor conflicto racional no generar pasiones en los demás, a tener una relación odio-amor con la sociedad entera, una teoría muy enferma, pero bastante real.

En este momento no estoy queriendo ser deliberadamente arrogante, más bien es un momento de reflexión disparatado en el que tú y yo analizamos nuestras relaciones humanas y que tanta satisfacción nos dan.
Veras, existe un ponto en la vida de todo treintón que se deja llevar por la química corporal y esta a merced de lo que se llama conciencia, y no una conciencia externa como Pepe Grillo, más bien voces internas que lo critican a uno, creo que necesito internarme en un manicomio.

En fin, ámame u ódiame pero no te quedes en un punto intermedio. Y como ya lo decía si me odias no me lo digas, que siento feíto.

Yes

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com