Por qué me heredo un juanete y no su nariz
Es curioso, pero nunca estamos conformes con nada, NADA, de lo que somos, lo que tenemos y mucho menos las características que poseemos, los lacios quieren pelo chino, los de pelo chino lo desean lacio, los blancos quisieran ser más morenos, los morenos blancos, los altos chaparros, los chaparros altos y así sigue y sigue esta historia de nunca acabar.
Las personas, yo, tú y los demás siempre deseamos algo que no tenemos, pero cuando se trata de cosas, logros, empleos o metas, pues es simple, ponte a trabajar para buscar tu objetivo; pero cuando se trata de ti y quererte cambiar no es nada fácil, nooooooooo, para ello necesitas mirarte en un espejo aceptarte cómo eres y sacarle provecho a lo que sí tienes. Sin embargo, hacer esto es muy complejo y que hacemos o haces en lugar de ello, pues culpas a tus papás y maldices la genética durante toda la jodida vida.
Por qué me heredo un juanete y no su nariz
O sea como es posible que tus papás sean hermosos posean rasgos finos y bellos como nariz afilada, barba partida, rasgos faciales bien definidos, gran altura, músculos, hermoso cabello, dentadura perfecta, pies bien formados y tú simplemente no heredaste nada de esa bella genética, tu nariz es normal común y corriente, tu cabello siempre luce opuesto a lo que ves en comerciales de televisión, eres de altura promedio y encima te heredo tu mamá su mugre juanete, o sea que pedo, pudiéndote heredar mejores cosas, la vida, el maldito ADN o las casualidades hicieron que tuvieras un juanete y una apariencia normal, mientras claro, tus hermanos lucen tan bien y sin pinches juanetes, tú tienes que aguantarte esta cruel ironía de la vida.
Oh, pero claro, le harás saber toda la vida a tus padres que estás MUY molesto o molesta porque en vez de heredarte rasgos físicos “bonitos” simplemente te heredaron defectos. De hecho, la historia del juanete es real, el otro día alguien me platicaba el trauma de su vida porque su mamá le heredo un juanete, pudiéndole haber heredados millones de cosas, pero creo que ese reclamo ella lo hará del conocimiento de su madre de por vida. La genética es extraña y en este momento uno no puede decidir que heredarles a los hijos, tal vez algún día no muy lejano, sucede de forma masiva, aun así, ahora te jodes y sufres o disfrutas lo que te dio esta vida.
Sin olvidar que nuestros padres también nos heredan cosas peores, como un mal genio, ser obsesivo-compulsivo, medio bipolar y todos esos padecimientos mentales que agobian a las sociedades modernas, solo te queda disfrutarlos, bueno eso hago yo y exploto al máximo todos mis recursos. De hecho, estoy muy agradecida por todo el material genético que me heredaron mis padres, la verdad no tengo quejas por mis rodillas defectuosas, mi oreja chueca, mi barba partida, mis pedos mentales, mi lunar en la nalga, mi altura o mi cabello, de hecho estoy muy agradecida.