¿Tenemos conexiones con nuestros amigos?
Últimamente hay un tema que me genera una gran curiosidad, y es la amistad, un tema, que siempre ha salido de mi foco de interés, ¿amigos?, supongo que no es un tema tan polémico e interesante como el amor; pero, comienzo a pensar que es un error, y que la amistad, es igual de compleja e interesante y algo de lo que una persona no puede prescindir, ¿o sí?
Digo, sin amor, o romance, se puede vivir, y si bien hay épocas en la vida, en las que tienes pareja, cuando no la tienes, no pasa nada, no pasa más allá del sentimiento apremiante de encontrar a alguien a quien amar; pero relativamente se puede vivir de forma funcional sin pareja, pero, ¿se puede vivir sin amigos?
¿Se puede?
Acaso sería muy arrogante decir que no se necesitan, ¿acaso lo sería?
Bien, no creo que yo pueda ser la persona correcta para responder esa pregunta, que tiendo a ser medio mala amiga, y olvidarme de ese contacto diario, necesario e íntimo que se genera con una persona, esa conexión especial que únicamente surge, cuando pasas mucho tiempo con una persona, y en el caso de la amistad, este tiempo, no tiene ninguna intención, más que simplemente compañía, fraternidad, cofradía y comprensión, que solo un amigo puede brindar.
Los amigos, ese mal necesario de la vida, que nos levantan el ánimo en tiempos de tristeza, nos dan su consejo, su visión de la vida, y nos hacen ver nuestros errores, los amigos son esa bien necesario de la vida, para sentirnos acompañados y tener, por lo menos un aliado.
En verdad, la amistad hace mucho por las personas, ahora, no todos son amigos, y quien crea que todas las personas con las cuales se relaciona, son sus amigos, está en un error, pero tampoco se puede desechar a estas personas y todos ellos suman a la experiencia de vivir; ahora, creo que mucha de mi aversión contra los “amigos”, es contra el concepto social, ese que está asociado a la popularidad y cuando los amigos se convierten en un coto excluyente en el que la media dicta el tema de conversación y quien es aceptado o no.
En ese sentido, soy la primera detractora de este concepto social hipócrita de la “amistad”, pero en un sentido ideal, la amistad es otra cosa, y se necesita a esa persona llamada amigo, simplemente para funcionar.
Ahora, tal vez suene arrogante, insisto, porque si tengo amigos, muy pocos y muy selectos, que ellos se merecen un premio por aguantarme, pero, creo que la amistad, como tal, es un concepto sobrevalorado.
La buena noticia, es que mis amigos son unos santos y no se tomarán tan en serio mi crítica contra estos roles sociales; pero creo que tal vez sea muy injusta o critica del concepto amistad, después de todo, siendo una romántica, creo que el pilar del otro concepto, o la base, debería ser la amistad y esas conexiones que creemos existen con otra persona.
Interesante y controversial, acaso en verdad existen esas conexiones con esas personas a las que llamamos amigos; esas personas que se unen a esa persona de una forma poderosa, como imanes de polos opuestos, que no se pueden separar y se necesitan para complementarse, ¿acaso es cierto eso?
Bien, la amistad que se desarrolla con una persona, puede llegar a ser muy profunda, porque se asegura, que existe una conexión, y no es una conexión cósmica o mágica, no, y todo parte de la lógica, de que las personas que nos rodean y en las cuales confiamos, ayudan a modificar nuestra percepción y entonces se crea esa conexión, que parece mágica con esa persona.
