Sin maquillaje también eres bella
Siempre he sido partidaria y entusiasta de la belleza natural de todos, esa que está dentro de cada una de las personas, esa belleza en sus rasgos, en su carácter, en esos pequeños detalles que nos hacen diferentes; esa belleza de aceptar quienes somos, pero no solo aceptarlo, sino abrazarlo y disfrutarlo, esa belleza que está en nuestras curvas, bordes, formas e imperfecciones, esa belleza única que parte del concepto propio de “me gusto” y me gusto mucho.
Un concepto de belleza que se aleja de las etiquetas de flaco, gorda, feo, porque no hay que olvidar nunca, que la belleza es subjetiva y radica siempre en el espectador y para comenzar a sentirte bella o bello, tienes que ser tú ese primer observador.
No hay que olvidar nunca que el primer observador de esa belleza, tu belleza, tienes que ser primeramente tú, fan por tu belleza, por tus características y por todo lo que eres.
Tienes que gustarte y aceptarte por lo que eres, ni más, ni menos, y la mejor forma de apreciar esa belleza natural, es mirarte al espejo y darte cuenta de que eres increíblemente hermosa y bella, con esas curvas extras o sin ellas, creo que todas somos hermosas y tal vez hable mi lesbiana interna, pero yo encuentro a todas las mujeres bellas, hermosas, fascinantes y cautivadoras.
Suena raro y nunca lo he dicho en voz alta, pero cada que conozco a una chica, tengo un crush con ella, por esa belleza que la hace diferente y por esas cosas que la hacen magnífica, siempre lo he creído sin maquillaje también eres bella y las mujeres no deberían recurrir a kilos y toneladas de maquillaje para intentar brillar, ya son bellas sin maquillaje.
Además, nuestra mejor belleza está adentro, no hay que olvidar nunca eso. Así que, porque pasamos tanto tiempo produciéndonos por fuera, y no por dentro.
Ahora y porque hablo de todo esto, de la belleza interior, la belleza natural y sentirnos a gusto con nosotros y amarnos un chingo, tanto que nos sentiremos satisfechos y podremos amar a alguien más.
Pero entonces si soy tan consciente de eso, porque tengo que recordarme a mí misma sin maquillaje también eres bella, pues bien, la semana pasada que me arregle y maquille, todos parecían aceptar más y mejor esa nueva versión de mí y todos me animaban a seguir buscando mi belleza externa; pero extrañamente algunas personas importantes, entre ellas un viejo amigo para recordarme que lo mejor de mí está adentro, que soy más bonita sin maquillaje y el disfrutaba verme así, despeinada, salvaje y natural.
Creo que todas las mujeres deberíamos recordar siempre:
Sin maquillaje tambien eres bella, no necesitas recurrir a toneladas de maquillaje para cubrir imperfecciones, corregir cosas y resaltar ciertas características, así como eres, ERES BELLA.
