Si no me sigue para que lo sigo yo
Tan simple como eso, aunque de cierta forma he cambiado un poco los protocolos de uso de twitter, anteriormente era tú me sigues, pues yo te sigo; pero ahora es un simple “gracias por seguirme”, solo eso.
Es bien curioso cómo funciona el honor de los tuiteros, si nunca los sigues no hay bronca, pero si los sigues y dejas de seguirlos, tómala te van a hacer la ley del hielo y obvio te van a dar clic en unfollow, pero para que quieres leer en twitter updates de personas con las que no concuerdas o un día se les aloco la hormona y te spamearon la portada de twitter.
Si no me sigue para que lo sigo yo
Pero bueno, la sabia Yesica del pasado que siguió a todos aquellos que le hacían el gran honor de seguirla es algo rencorosa, obvio, si un día dejas de seguirme, pues para que carajos te sigo yo, ¿acaso soy idiota o masoquista?, bueno, en realidad eso lo hago si me doy cuenta, si no, no hay bronca. Eso de andar buscando quien dejo de seguirme y preguntarme metafóricamente por qué lo hizo y acosar a esa persona para hacerle saber que se acaba de perder del mejor tuit de su vida, me da flojera, mucha energía desperdiciada de forma absurda.
En realidad creo que ya me canse de las redes sociales, ya estoy fastidiada de vivir para ellas y en función de conseguir un amigo más, un seguidor o un like, ya no me importa en lo absoluto; no sé qué carajos sucedió, pero aquellas ansias de fama y que la gente me reconozca por mi blog, por mis ideas, ya no me importa. Tal vez solo por fin me di cuenta y me cayó el veinte de que este es un hobbie, no el sueño de mi vida.
No soy escritora, no soy reportera, no soy comunicóloga, solo soy una bloguera normal que intenta sobrevivir en el intento de vivir, ya me canse de darle gusto a todos, simplemente ya me canse. Así que si alguien no me sigue, a la mierda, me vale madres, digo, no quiero sonar grosera y arrogante menospreciando a nadie, no sé, lo único que trato de decirte es que dejes de preocuparte por cosas tan tontas como esas, si alguien te sigue o no te sigue, es su jodido problema, solo vive tu vida sin importar que los demás te afecten a ti o tu a ellos.
¡Simplemente a la mierda!, si alguien no le gusta cómo eres, que dices, que piensas, recuerda que nunca le vas a dar gusto a nadie y es mejor que te odien por lo que eres a que te amen por algo que no eres. Prefiero ser fiel a lo que creo a corromperme en el proceso de la aceptación.
Ya no me importa que nadie me siga, ya no me importa que nadie me escuche, ¿por qué? Tal vez me volví loca, o cínica o comprendí una gran lección de vida.
oh, suena interesante porque no lo había pensado antes. Muy interesante tu punto de vista, Yesica
😀