Reseña de la película Good Boy, ¿está buena?

El revuelo en torno a Good Boy fue innegable. Tráilers virales, promesas de exhibición en cines, excelentes reseñas de la critica en festivales de cine que decían “lo mejor del terror del año”… hizo que las expectativas por esta película estuvieran por las nubes. Pero, ¿cumple esta película con todo el bombo? Aquí te lo contamos sin rodeos.

Una trama que deja mucho que desear

Olvídate del suspenso o la lógica. La historia de Good Boy se desdibuja rápidamente, dejando al espectador con más preguntas que respuestas. No hay un desarrollo sólido de personajes, ni una narrativa que te atrape, ni siquiera hay lógica. En resumen:

  • Ausencia de tensión: Los intentos de generar miedo son escasos y poco efectivos.
  • Falta de conexión: La relación entre dueño y perro carece de profundidad emocional.
  • Cuestionamientos éticos: Algunas escenas generan incomodidad al sugerir un posible maltrato animal.

Indy: Un rayo de esperanza en medio de la oscuridad

Si algo rescata a Good Boy, es la actuación de Indy, el perro protagonista. Con su carisma y expresividad, logra conectar con el público en ciertos momentos, pero se limita a que el perro luce bien en pantalla y solo eso. Sin embargo, esto no es suficiente para compensar las fallas de la película en su conjunto.

¿Un proyecto escolar ambicioso o una decepción cinematográfica?

Con una duración de apenas una hora y siete minutos, Good Boy se siente como una eternidad. La falta de ritmo, la trama insustancial y la ausencia de ideas originales hacen que la película se asemeje más a un proyecto estudiantil fallido que a una obra cinematográfica independiente digna de ser vista.

Si buscas una película de terror que te haga saltar del asiento o una conmovedora historia sobre el amor entre humanos y animales, Good Boy no es la opción. A pesar del talento de Indy, la película se queda corta en todos los aspectos importantes.

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com