¿Por qué nos cae tan bien la comida caliente cuando estamos enfermos?

Hace poco leí algo que se me quedo grabado en la mente, y es que, cada año el frío se supera así mismo para traernos cada temporada nueva una época más fría que la anterior; esto significa dos cosas para nosotros, a mayor frío, mayor cantidad de abrigos y por supuesto, mayores enfermedades virales esperándonos en la vuelta de la esquina para enfermarnos.

Así que, es un hecho, con las bajas temperaturas que nos azotan, terminaremos enfermos, gripientos y moqueando sin importar lo que hagamos, cuando comienza la temporada invernal.

Esto hace que nos preparemos mentalmente para los resfríos, las gripas y la influenza con muchos suéteres, bufandas, pero, sobre todo, preparados con galones de líquidos calientes que reconfortan el alma y nos ayudan a sentirnos mejor.

Pero, ¿Por qué nos cae tan bien la comida caliente cuando estamos enfermos?

Bien, entiendo la lógica, que, beber cosas frías cuando estas enfermo solo empeora tu condición porque irrita la garganta haciendo que te sientas peor, pero, porque la comida caliente tiene un efecto contrario, casi tan curativo y maravilloso como las medicinas.

Bueno, mucho tiene que ver con la inflamación que sufre la garganta ocasionada por los virus y la enfermedad, esto hace que inclusive pasar agua sea una experiencia dolorosa; es ahí donde entran los líquidos calientes en formato sopas, caldos, infusiones tibias o tés, y lo que hacen, mucho gracias a la temperatura, es calmar el dolor y permitirte tragar sin sentir esa irritación.

Los líquidos calientes permiten que puedas pasar alimento por el tracto digestivo sin sentir dolor, es más, hay algunos especialistas que dicen que incluso se facilita la digestión, esto tiene cierta lógica que tiene que ver con la temperatura interior de nuestro cuerpo, especialmente la del estómago que está a 37°C, y al igualar tomar líquidos calientes se igualan, o por lo menos se acercan esas temperaturas dando una sensación de alivio y bienestar.

Así que, si estas enfermo una buena manera de cuidarte es tomar muchos líquidos calientes.

Además, el consumo de líquidos permite a tu cuerpo expulsar las flemas mientras te miente hidratado.