Música y Conciertos

Paquita la del barrio se escucha hasta en el cine

Si pensabas como yo, que escuchar Rata de dos patas, únicamente pasa en cantinas del centro o a media noche cuando uno de tus vecinos, bueno, más bien una de tus vecinas, anda sufriendo de amor, te equivocas Paquita es universal y la puedas escuchar en cualquier lugar, en el que menos lo imaginarias, en el lugar y momento más extraño del mundo como me paso a mi mientras esperaba la peli, para escucharse reproduciendo directo de un smartphone en YouTube con una pésima calidad de audio esta canción, la máxima canción para personas dolidas y frustradas en el amor, y aunque no me lo creas historia verídica, la escuche en el cine mientras esperaba a que comenzará la película, las personas de atrás ya estaban animando la función.

Pero ciertamente esta canción está diseñada para el género femenino, te juro que no me imagino a un hombre cantando Rata de dos patas, te estoy hablando a ti para referirse a una mujer, neta, no me imagino a un hombre tan dolido y tan frustrado como para aventarse un palomazo de esta rola, porque para olvidarse de malas mujeres y sus malos amores, hay otras canciones, sobre todo norteñas o hasta cumbias, solo acuérdense de la mundialmente conocida canción Montón de Estrellas de Polo Montañes, en la que es tan común cantar con sentimiento a esas malas mujeres que se roban el aliento de forma desalmada.

Curioso pero mientras las mujeres cantan “rata inmunda animal rastrero escoria de la vida adefesio mal hecho”, los hombres corean “porque yo en el amor soy un idiota que ha sufrido mil derrotas, que no tengo fuerzas para defenderme pero ella casi siempre se aprovecha unas veces me desprecia y otras veces lo hace para entretenerme”, creo que aquí la única constante es que todos sufrimos en el amor, hombres o mujeres.

Por ello creo que es un grave error decir que todos los hombres de planeta son animales rastreros o todas las mujeres son arpías desalmadas, creo que cuando uno habla de amor, siempre se habla de un dolor inherente que tiene que ver con expectativas y sobre todo con la madurez emocional que tenga la parte a la que se quiere.

Decir que las mujeres son malas es igual de absurdo que decir que los hombres son ratas de dos patas, aquí reciclo aquello que una vez le oí a Kristoff Raczynski, todos hemos sido el cabrón de alguien y el pendejo de otra persona, a lo que se refería este polémico conductor, es que en la vida a veces nos toca ser el malo y otras el bueno, no porque lo deseemos o lo busquemos, sino porque así pasa en las relaciones.
En nuestra sociedad el amor y todo tipo de relaciones está diseñada para tener un rol de opresor y un oprimido, ese es nuestro sistema de interrelación. Extraña idea, sobre todo si partimos del hecho que el amor y la amistad deberían ser equilibrados y de respeto, pero no se puede olvidar que en toda relación hay un alfa y un seguidor, que dependiendo de cada relación que tengamos, a veces podemos ser el cabrón/alfa o el pendejo/seguidor, todo depende de cuánto queramos a esa persona.

Pero cuando pienso en esto del amor, las malas relaciones y las feas rupturas, creo que no se puede uno encasillar y echarle del todo la culpa a la otra persona, a decir verdad soy de la fiel idea de que la culpa, la culpa siempre es de uno, por diferentes motivos, por omisión o por acción, pero cuando algo termina, algo truena o algo pasa, siempre en vez de culpar a la otra persona y pensar que te relacionaste con la peor escoria del mundo o una mujer inmadura, desalmada o meramente interesada, deberías evaluar tu qué hiciste y como abonaste a esa relación, hay que pensar de forma lógica y consciente si fuiste el opresor o el oprimido, que pudiste haber hecho diferente y la pregunta más interesante, porque dejaste que esa relación llegará a esos extremos en los que el solo hecho de oír el nombre de esa persona te pone mal o te harta, ¿por qué dejar que la situación llegará al punto de no retorno?, (te recomiendo leer este post), por qué, por qué dejaste que se viciara tu relación al punto de odiar a alguien y emborracharte cantando Rata de dos patas, te estoy hablando a ti.

Y lo peor es cantarla con sentimiento y pensar efectivamente que estuviste en una relación con un animal rastrero, naaaaaaaaaaaaa, olvídalo, las relaciones terminan se desgastan y las cosas pasan, no te traumes escuchando a Paquita una y otra vez en el cine, en lo que empieza la función y haces que todo mundo se entere de que te rompieron el corazón abismalmente.

Eso es interesante, ¿Quién en su sano juicio es tan masoquista para estar con una persona que le hace daño?, esta vida es tan corta que no vale la pena pasarla dedicando esas canciones o mejor aún, perdiendo el tiempo con alguien que no te quiere o te hace daño.

El amor es raro y creo que todos tienen diferentes formas de lidiar con el dolor, pero yo le recomendaría a todos aquellos que sufren con Paquita o Polo, que mejor aprendan, el amor no debe ser horrible, en vez de despedirte del amor porque apesta, mejor despídete de todos esos no que escuchaste, despídete de todas esas veces que se apagó tu luz o tu esperanza, despídete de lo malo, aprende, olvida y supera.

Eso sí, que la lección valga la pena, para que te conozcas, te descubras y sepas que es lo que no quieres en una futura relación, creo que eso es más constructivo que cantar “alimaña culebra ponzoñosa”

Yes

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com