Nos encanta el morbo y la violencia
O nos acostumbramos a ella o simplemente nos gusta, porque ya no vivimos sin nuestra dosis diaria de violencia, pero ¿por qué?
¿Acaso somos adictos a esta nueva droga?, o simplemente es el proceso natural de vivir tiempos violentos, no sé, realmente no sé qué pase, pero antes la indignación colectiva era la respuesta a los actos violentos, y se reprochaban, nos quejábamos de ellos y hacíamos algo, o por lo menos se intentaba para frenar la violencia.
Sin embargo, ahora la violencia se alimenta con nuestro morbo ese que es insaciable y nuestras ganas embebernos en el morbo del sadismo y la violencia sobrepasa la curiosidad o las ansias de saber, ahora se nota un gusto retorcido y perturbado por conocer esos detalles violentos de la vida violenta que se vive hoy en día.
Y a esto hay muchas personas que apuntan que nos hemos desensibilizado tanto, que es natural esta nueva forma de convivencia con la violencia, pero, más que estar desensibilizados, en muchas personas parece un gusto macabro por la violencia.
No me crees, ¿crees que exagero?, solo hay que salir a las calles y darse cuenta como las personas solo consumen aquello que es violento, salvaje, feroz y entre más sangre tenga, o más morboso sea, mejor.
De esto me di cuenta el otro día que salí a la calle, cuando un voceador de periódicos traía un altavoz para anunciar a los cuatro vientos el brutal asesinato a golpes de una mujer cuyos agresores después de violar, mataron.
Es indignante que eso suceda, pero aún es más indignante que alguien con tal de vender un periódico más haga de este suceso lamentable, un argumento de ventas, y lo peor, es que las personas consumimos esa violencia y la alimentamos, como un fuego voraz que no para y que algún día nos llegará.
Porque somos seres violentos, que amamos la violencia y disfrutamos el morbo que esto conlleva.
Pero, ¿por qué?, neta, ¿acaso estamos en un estado tan evolucionado que solo buscamos este tipo de contenidos?, o más bien, involucionamos tanto, que regresamos a nuestros origines más primitivos, aquellos que solo se sacian con sangre, violencia y morbo.
¿Qué es?, ¿qué es lo que está pasando?, acaso con el paso del tiempo vamos en retroceso, como los cangrejos vamos hacia atras o será que vivimos en tiempos tan violentos, tan salvajes y tan sangrientos que la única forma de sobrevivir a ellos es adaptándose, acostumbrándose y hasta disfrutando de esta ola de violencia a la cual nos hemos expuesto tanto que simplemente ya estamos muy familiarizados y algunos la disfrutan.
No sé, pero me parece horroso que estas cosas pasen, aunque también es escandaloso que nos escandalice más que alguien use este tipo de marketing, que el hecho ensimismo.