Vida y Estilo

No quiero contestar esa llamada

No te ha pasado nunca que por una estúpida coincidencia o ya sea por ubicación geográfica dentro de una habitación estas junto al jodido teléfono y pues cuando suena tú lo contestas, pero antes de contestarlo y después te ves metido en una serie de problemas y cuestionamientos que se hubieran evitado si no estuvieras junto al teléfono, o tal vez les pase como en mi caso y me avientan el teléfono inalámbrico para que yo lo conteste o me gritan CONTESTA, pero que rayos, que acaso no saben mis roommys, o sea mi hermano, que nunca tengo conectado el cerebro a la boca y termino confundida en las llamadas.

Al igual que le dicen a los niños que no contesten por eso de no dar información, no los asusten o los extorsionen no me deberían pasar llamadas, mejor dicho no debería contestar pero como a él le da flojera lidiar con la gente mejor me avienta el teléfono a la cabeza, así no hay pierde, seguro lo contesto con una contusión real.

Sin embargo tengo algo raro con las llamadas, ay como me acuerdo cuando hice el peor oso de mi vida con un minitelefonito de 2 cm, no era de juguete, era de esos teléfonos mamones de hace como 6 años que eran microscópicos y pues me lo prestaron para llamarle a mis papas en la universidad y como media dos jodidos centímetros me lo pasaba a la boca para hablar y al oído para escuchar, debió haber sido muy gracioso para Ivette la dueña del celular y su novio Toño verme hacer eso, no sé cómo se aguantaron la risa explosiva, seguramente cuando me fui lo hicieron, yo lo hubiera hecho. No sé porque pero por alguna extraña razón siempre hago el ridículo con la telefonía ya sea fija o móvil, no sé porque pero desde que me hablan y es un número desconocido yo me asusto, digo, quien me está hablando, ah, pero esa soy yo una rarita desconfiada que no sabe usar mucha tecnología telefónica.

Definitivamente no debería pensar nunca en pararme junto a los teléfonos, pero a veces es casualidad lo juro y en mi escritorio tengo uno, esa es más que una coincidencia, alguien me tendió una trampa.

Que me dices cuando estas en casa de un familiar o amigo, es como muy incómodo que este sonando el teléfono no haya nadie cerca y tú no sepas que carajos hacer, pero obvio no debes contestar por más que sea tentativo ya mejor como que te haces wey y esperas a que todo termine pronto y cierras los ojos.

En tu casa es probable que sea un banco para venderte una tarjeta o ni es para ti y tu roommy te dice en voz considerablemente alta “no, no quiero contestar porque dices que si estoy, te pasas, que mala onda, inventa algo, di que salí” y tú peleándote porque tu palabra está en juego frente a un desconocido y ya dijiste que sí está y probablemente esa persona escucho todo el show y terminas peleando físicamente con tu roommy para que conteste el teléfono, mientras haces gestos, lo regañas y le intentas dar el teléfono.

A menos claro está que seas como Isabel y cuando le llama su suegra en frente de las visitas para quedar muy chic se separa la bocina la pone muy lejos de su cara y empieza a imitar a su suegra, eso suena gracioso si lo vez en iCarly, pero para una señora de 39 se ve muy mal.

Yes

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com