Los estragos de la gripa

Andar moquiento, estar aburrido en casa, ser el enemigo público número uno en todos lados y por ende la persona más evitada de la colonia.

Pero ¿Quién carajos se enferma en abril?, y bueno unos días de mayo, ¿Quién demonios?, y esa respuesta es yo, chale, me caga enfermarme, de verdad que me caga, porque, mmmmmm, a mi me gusta la calle, salir, pasear, y por supuesto la vieja práctica de bañarte y andar rechinando de limpio; porque cuando te enfermas y grave lo primero que te dicen es descansa, acuéstate, duerme, no te bañes, no tomes cosas frías, no salgas y puro bla,bla,bla.
Me estás diciendo que eso de bañarme de donde lo saque, no sé, la verdad no recuerdo bien la fuente, pero tengo bien arraigada esa costumbre de que cuando andas enfermo es mejor oler a perro sucio que bañarte.

Si vas añadiendo estos contras a la lista, pues te das cuenta que enfermarte es horrible, a diferencia de cuando eras chico y buscabas cualquier oportunidad para atrapar virus, gérmenes y baterías. Es más, te hubieras revolcado en un charco de virus de ser necesario, lo que fuera para quedarte en casa con mimos, cuidados, comida en la cama y faltar a la escuela. En aquellos lejanos años era una bendición, pero hoy en día es más bien un castigo.

Bueno en mi caso porque soy pésima cuando estoy enferma, quiero que me cuiden como cuando era chamaca, y me lleven mi jugo a la cama con unos hotcakes, me canten soft kitty, me abracen, me acomoden las almohadas, la cobija, me den mimos y cariño, pero lo único que obtengo es vete para allá, o sea quédate en cuarentena para que no me contagies, y ni se diga de mi sopa de pollo caliente, ese es un sueño guajiro que nunca podré alcanzar.

Enfermarse apesta, sobre todo porque dejas de hacer tu vida de forma común, y se pone más fea la cosa cuando te haces viejito, si, un buen día te das cuenta que eso antes no te pasaba y ahora es el pan de cada día, eso de tener que cuidarte. Antes podías estar en la calle, sin suéter mientras llovía a las 3am y ni te pasaba nada, pero llega cierta edad de la vida en donde hacer eso significa una neumonía.

Y lo más horrible de todo es que vas con tus papas para que te cuiden y te mandan a volar diciéndote “que te cuide tu mejor amigo” y cuando vas a que te cuide tu mejor amigo este muy descaradamente te dice “que te cuiden tus papás”, o sea chale, neta, chale.