Ícono del sitio El Blog de Yes

La soledad

Te acostumbraste a la soledad o ella se acostumbro a ti

Siempre he sido una persona solitaria y muy independiente, nunca me ha hecho falta nadie para nada, en ninguna actividad de tipo social, recreativa, cultural; ya todos los que me conocen saben muy bien que me presento a todo tipo de eventos yo solita sin necesidad de compañía y sobre todo es que esté estatus solitario no me molesta, aflige o entristece en lo más mínimo, a pesar de que muchos hagan este hecho evidente “AY, pobre esta solita hay que presentarle a alguien”

Puede ser que sea mi extrema independencia la que habla por mí, pero no me pueden culpar tengo 29 años por mi cuenta, yo sola haciendo lo que me da la gana sin darle cuentas a nadie, complaciendo solo a una persona a MI.

Entonces el otro día que estaba divagando -como siempre- cuando vino a mí, como iluminación del día la frase (de mi autoria JAJAJA) “ME ACOSTUMBRE A LA SOLEDAD, ó ella se acostumbro a mi”; ya no soy yo nada más, ahora somos dos y andamos en par: la soledad y yo. Al fin de cuentas ya no estoy yo sola.

Estamos en pareja en un compromiso mutuo que espero dure muchísimos, muchísimos años, este es un compromiso a largo plazo por el cual estoy dispuesta a luchar. A esta capitalina loca no le va eso de andar en dos, por experiencia propia se que cada que lo intento salgo escaldada, así que mejor me abstengo de cualquier intento inútil y disfruto de mis pasos por esta cosmopolita ciudad.

Puede ser que mi cerebro al pensar que esta en compañía de la soledad, no se sienta tan solo; que contradictoria soy ¿no lo piensan así? hablando de mi eterna dicha por estar sola y ahora contemplo la distorsionada opción de estar en contemplación de la soledad, considerándola una excelente compañía, por que al igual que yo siempre ha vivido en el aislamiento de sus pensamientos, ensimismada en su ser.

Me pregunto ¿Por qué nos hace falta compañía?, ¿Por qué vivimos buscando algún complemento, en lugar de completarnos nosotros mismos? ¿Realmente hace falta alguien más? Creo que no.

En verdad no se necesita a nadie más para ser feliz, sentirse pleno y completo, para reír, llorar, gritar, saltar, pensar. Simplemente basta con mirar hacia dentro para variar y no afuera, busca en ti lo mejor y sácalo a la superficie veraz que de esa forma tu naranja esta completa y que el mejor complemento para ti eres tú.

Salir de la versión móvil