“jiji” ¿Qué paso con el clásico jajaja?
En la era digital, nuestras interacciones han evolucionado, y eso incluye cómo nos expresamos en términos de risa. Recuerdo aquellos tiempos en que la risa virtual era claramente representada por un generoso “jajajaja”. Esa risa se extendía con alegría, llenando de vida las conversaciones y haciendo que una simple interacción se convirtiera en un momento memorable. Pero, de repente, parece que un nuevo fenómeno ha invadido nuestra comunicación online: el “jiji”.
El “jiji” ha ganado popularidad, pero ¿qué significa realmente? Este tipo de risa suena más tenue y juguetona, como una especie de broma ligera. Mientras tanto, el “jajajaja” manifiesta un estado de pura diversión y sinceridad. Es como si en un momento se hubiera distribuido un manual que indicaba cómo variar nuestras risas digitales. Pero, ¿realmente necesitamos estas nuevas entidades?
Hay algo peculiar en las risas como “jiji” y “jejeje”. Podría parecer que están más relacionadas con una forma de ser educado que con una expresión genuina de alegría. ¿Quién no se ha cuestionado sobre la autenticidad de una risa que solo se manifiesta en letras? Cuando nos reímos de verdad, lo hacemos con un entusiasmo desbordante, que se traduce en un “jajajaja” colosal. Es un eco de nuestro disfrute y del impacto que algo ha tenido en nuestro ser.
Podemos mirar a las influencias de la cultura popular, como aquellos personajes de Eiichiro Oda, que tienen una forma de reír un tanto peculiar. Personajes como ellos ilustran lo extraño de ciertas expresiones de risa que, aunque graciosas, suenan un poco fuera de lugar en la vida cotidiana. “Jiji” parece ser un intento de encontrar un punto medio entre la risa auténtica y un gesto amistoso que, a veces, puede parecer superficial.
Hay quienes argumentan que el uso de “jiji” puede denotar una falta de sinceridad, como si intentáramos suavizar la crítica o minimizar la intensidad de una broma al decir solo “jiji”. Para muchos, esta risa carece de la fuerza que acompaña a una verdadera carcajada, y lo preferible sería optar por mantener la esencia de nuestras risas, que es eufórica y contagiosa.
No obstante, hay un lugar para todos tipos de risas en la interacción social. Cada quien tiene su estilo y sus maneras de expresar alegría, aunque algunos nos suene poco natural. Tal vez sea la evolución de la comunicación, la inclusión de variedad que refleja la complejidad de nuestras emociones en línea. Y es que, al final del día, reírse, ya sea con “jajaja” o “jiji”, es un recurso que todos empleamos para compartir felicidad, sarcasmo o a veces, hasta una broma amistosa.
Entonces, la próxima vez que te encuentres entre risas digitales, evalúa qué tipo de risa se adapta mejor a tu personalidad. La risa más auténtica, esa que resuena desde lo profundo, sigue siendo “jajajaja”. Esa es la que realmente nos conecta y nos hace sentir vivos. Al final, todos estamos aquí para disfrutar y compartir buenos momentos, ya sea de forma ruidosa o con un “jiji”.
La diversidad de expresiones de risa, aunque a veces genera confusión, también enriquece nuestra comunicación. Así que, ya sabemos, cada quien tiene derecho a reír como mejor le parezca, ¡y eso es lo que realmente importa!
Yo me rio con jejeje porque así me río en la vida real, es mas cada vez que lo llegó a escribir me estoy riendo de verdad, aunque también uso el jojojo, pero ese sólo en temporada navideña
Tendré que verificarlo y certificarlo en persona