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Fracasar en privado

Muchas personas tienen la idea de que fracasar es lo peor que les puede pasar en el mundo, y cómo no sería así, después de todo se considera erróneamente al fracaso como lo opuesto al éxito, eso hace que nos asuste y mucho la mera idea de fracasar y eso nos paraliza y evite que hagamos algo, así que, preferimos no intentarlo a FRACASAR, pero, sabías tú que el verdadero opuesto al éxito es no intentarlo, sabías tú que es más fracaso no fracasar y quedarte congelado, ¿lo sabias?

Sí, aunque parezca ilógico el camino al éxito se pavimenta con muchos fracasos y son aquellas personas, las que fracasan una y otra vez, pero se levantan, aprenden de sus errores y siguen intentándolo con todas sus fuerzas, esas personas son las que lo logran y convierten muchos errores, equivocaciones, frustraciones y metidas de pata en algo épicamente majestuoso.

Fracasar nos acerca al éxito, así que, si uno no está fracasando lo suficiente y diariamente es momento de replantearse las cosas y pensar en grande, pensar en fracasar, pero no con la idea de hacer algo que fracase, sino hacer algo que sea un éxito, aunque hay que saber de antemano que por pura probabilidad el 99% de las cosas que intentes van a fracasar, pero ese fracaso tendrá un propósito, así que aconsejo dejar de tenerle miedo al fracaso, y en vez de eso, hay que aventarse a intentar el éxito fracasando.

Tal vez no suene con mucho sentido, pero en la práctica verás que tiene mucha profundidad; esa es la razón por la cual, creo que las personas deberían enfrentar sus fracasos de una forma distinta, y en vez de tenerle miedo, debería empoderarse del fracaso, no para ser fracasados, pero si conseguir el éxito fracasando mucho.

Es por eso que cuando me encontré la siguiente publicación en Facebook me hizo reír mucho y pensar en esta filosofía de los fracasos, y no solo les tenemos pavor, además de eso, buscamos a toda costa, que, si hay que fracasar sea lo menos aparatoso posible.

Ya sabes, algo así como cagarla monumentalmente, de esas cagadas y embarradas tan épicas que son muy dolorosas, pero, al ser privadas, o, mejor dicho, fracasar en privado nadie se entera.

Tal vez esa sea la clave para sobrevivir al proceso de fracasar y aprender de esta experiencia, y al fracasar sin hacerlo público, la valiosa experiencia de fracaso se queda, pero la vergüenza y la humillación de hacerlo públicamente desaparece.

Eso me parece interesante, porque no dejaremos de fracasar nunca, pero la hacer en un perfil bajo, fracasar tiene menos peso en el alma.

Y anteriormente se decía que no se debían contar los proyectos para evitar que salieran mal, por eso el consejo era no cuentes nada hasta que se concrete, así evitas que la mala suerte te afecte; pero creo que es más sabio pensar de esta manera y fracasar en privado puede tener muchos beneficios.

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