Encontrarte con alguien del pasado
Dime que haces cuando te encuentras por coincidencias de la vida a alguien lejano del pasado, digamos algo así de 3 a 4 años, la verdad no recuerdas bien porque enterraste ese recuerdo en lo más profundo de tu memoria, en un lugar del cual ya ni te acordabas que existió en un principio, un recuerdo tan vago y borroso que solo te ataca en las noches de insomnio o las mañanas en las que apenas tu cerebro está iniciando.
Pero esa persona no es cualquier persona, o no señor, esa persona es alguien especial y con mucho significado para ti, es más, un tiempo su nombre para ti era como una oración que repetías en las oscuras noches. Y no porque sintieras sentimientos nobles y profundos como el amor, más bien estabas obsesionado con esa persona; perdón, ese si es un sentimiento muy profundo y una que puede durar mucho tiempo para torturarte y jugar con tu mente hasta que pierdas la razón.
Como te decidiste de esa persona, de esa obsesión, mmmm, pues quien sabe, a lo mejor el tiempo, a lo mejor otras compañías, incluso valentía o huevos que un buen día le dijiste ADIOS a esa obsesión y poco a poco el tiempo fue dejando atrás ese recuerdo. Hasta que llega un día que ya ni te acuerdas que esa persona existió en tu vida, ya ni recuerdas los días en los que creías que vivir sin esa persona era posible; simplemente vives, disfrutas y sigues conociendo más personas y creando nuevos recuerdos, algunos que si tienes mucha suerte los recuerdas con agrado y otros lamentablemente los escondes en un rincón olvidado en tu cabeza.
Pero un buen día muchos años después te vuelves a encontrar a esa persona, una rara coincidencia que nunca en la vida creíste que puediera pasar, como encontrarte una aguja en un pajar y vuelves a ver a esa persona, una que hacía que tu corazón latiera a mil segundos por minuto y se detuviera con solo una mirada; una persona con tanto poder sobre ti que solo bastaba una sugerencia de su parte para que tú te pusieras en acción, aunque fueran malas ideas.
Encontrarte con alguien del pasado
¿Qué haces cuando te encuentras con esa persona?, vuelve a surgir todo lo que estaba enterrado o simplemente es un encuentro incomodo entre dos personas que ya no tienen nada que ver, solo silencios incomodos y recuerdos molestos que te hacen sentir nauseas o hasta coraje.
Tal vez podrías actuar casual como si ni te importara o te acordadas de esa persona, como si nunca la hubieras visto o nunca hubiera existido en tu vida, diría Miguel de Unamuno en uno de sus escritos que el olvido involuntario suele ser una grosería imperdonable, una de las que más molesta, y más cuando esa persona para ti fue importante, ¿actuar casual?
O te traiciona el subconsciente sacando todo aquello que enterraste mientras actúas nervioso, tiemblas y dejas ver que pareciera que el tiempo no paso, y sigues temblando mientras esperas una sonrisa, una sonrisa que nunca llegará. También están las personas que actúan con mucha arrogancia pretendiendo que el mundo está a sus pies y que esa insignificante persona que en algún tiempo fue el cielo, ahora no es más que una persona que no merece ni siquiera una mirada, pero supongo yo, que cuando eso se hace, es porque ese sentimiento está escondiendo otros sentimientos, como dolor o incluso fracaso.
Actuar normal, actuar como loco, actuar necesitado, actuar, ¿actuar?, porque habría de generarse una reacción, ah sí, porque tu mente y subconsciente te traiciona, quieras o no, encontrarte con la persona que en el pasado era importante, siempre tendrá que generarte una reacción.
En mi caso particular se me acelero el corazón ante ese imprevisto encuentro, uno que nunca hubiera imaginado ni en un millón de años fuera posible a pasar, pero curiosamente esa mañana, unos minutos antes de encontrarme a esa persona, hubo un eco en mi mente, una pregunta y una incógnita que me persiguió por 15 minutos antes de que me lo encontrará, algo así como un presagio extraño que se cumplió y antes de encontrarme con esa persona yo iba pensando ¿qué pasaría si me encontrará a Ricardo?, y en mi mente la respuesta es haría lo que siempre hago con las personas que no me caen bien, paso como si ni existieran y seguirá haciendo mis cosas.
Lo extraño es que solo pasaron 15 minutos para comprobar mi respuesta y en ese encuentro casual de 5 segundos mi corazón pasó de latir a 60 pulsaciones por minuto a 150 por segundo, mientras intentaba actuar normal, como si ni me importará estar frente a esa persona. Afortunadamente mi sueño crónico me hizo bostezar en el justo momento en el que se encontraron nuestras miradas, por primera vez en la vida tuve una reacción adecuada al momento, por primera vez tuve un bostezo en el justo y preciso momento. Mientras este gesto facial evitaba que el pudiera ver mi nerviosismo en mi cara o se diera cuenta que mi corazón latía mucho, por qué me paso eso, mmmmmm, no sé, tal vez un simple recuerdo porque de mi obsesión por esa persona ya no queda nada, más que un sentimiento de incomodidad que no puedo olvidar.
Pero me traiciono el subconsciente y encontrarme con él fue algo imprevisto, sin importar que tuviera 15 minutos pensando en que haría si viera a esa persona, no sé si fue un extraño y loco presagio o mi mente es muy poderosa como para cristalizar un pensamiento.
No se burlen pero realmente creo que tengo algo de psíquica y a veces para mí el pasado se funde con el presente y se enlaza con el futuro, así que cuando tengo una corazonada de algo siempre termina pasando y muy pronto. Sueños que se convierten en realidad, preguntas que oigo en mi cabeza y pronto escucho en una persona, mensajes que veo en mi cabeza pronto son realidad, coincidencia o estoy loca, cualquiera de las dos, pero ese día y con un presentimiento muy fuerte que me preguntaba qué harías si ves hoy a Ricardo, solo me tomo unos minutos para confirmarlo.
Que hice, bostezar y caminar como cuando veo a una persona que no me agrada, la ignoro, mientras tengo muy grabada la mirada de molestia, coraje y enojo con la que él me veía, no como si fuera una extraña más, sino como si fuera la persona que más le molestaba ver esa mañana de viernes o como si estuviera esperando una sonrisa que nunca llego.