Rupturas

Embriagarse por amor

Que levante la mano quien no ha hecho una estupidez por amor, en serio, el que esté libre de amores, que aviente la primera piedra, creo que así no iba ¿verdad?

Sin importar la edad, que tan grande o chico seas, que tan evolucionado o inmaduro sea tu estado mental/emocional, sin importar nada de eso, todos sufrimos por culpa del amor, sus desdichas y el curso natural del romance, el cual es muy similar al ciclo de la vida:

Nacer, crecer y morir

Igualito sucede con el amor, así que todos estamos condenados a sufrir de mal de amores, por ello hay que entender y hay que saber, y por supuesto estar preparados para el duelo, porque inevitablemente todo termina por terminar.

Así es la vida, así también es el ciclo del vida del amor; porque digo esto, pues, entre más rápido lo entiendas, menos vas a sufrir, bueno, eso es una mentira, saber que vas a sufrir de amor, no evitará que sufras, pero si te ayudará a enfrentar ese momento, esa separación y atender como lidiar con tus sentimientos, decepciones y el sufrimiento que traes en el pecho.

Pero no lo olvides nunca, todos sufrimos por culpa del amor.

Ni pedo, así es la vida, a veces somos Rafa, a veces nos toca el lugar de Lisa, así es la vida, y hay que entender que lidiar con las perdidas amorosas, que las rupturas sentimentales, serán algo cotidiano y parte de la vida.

Y esas rupturas nos harán hacer muchas locuras, y todas en nombre del amor, pero el amor que fue perdido.

Ahora gente, por favor, cuando perdimos un amor, en vez de desperdiciar tiempo, esfuerzos y recursos, es mejor aprender la lección, por más bizarra que esta sea, hay que aprender la lección de ese capítulo amoroso y dejar las locuras, para otras áreas.

Aunque, finalmente, y a pesar de todas esas justificaciones lógicas, uno simplemente termina haciendo esas tonterías de índole romántico.

Todos hemos hecho muchas locuras, desde llevar serenata e inmensos ramos de flores, largos mensajes de texto vía whatsapp hasta intrépidos planes de re conquista; todos hemos hecho algo de acuerdo a nuestras capacidades y por supuesto posibilidades, pero lo que hay en común en estas cosas, además de desesperación y sentir que la vida se te va con el alma, mientras un ser amado se desvanece, lo que hay en común, además de sentirte fatal, que te mueres, que la vida vale una mierda, y esas cosas dramáticas típicas de un truene, además de eso hay otra cosa que se comparte, lo que podría ser el común denominador y es el alcohol que siempre es parte de un truene sentimental.

Si hay una razón en este mundo, que es absoluta y universal, y te permite ponerte hasta las chanclas, es y obviamente sería una ruptura sentimental, y no importa si fue en buenos términos o te pusieron el cuerno, cuando pierdes a alguien que amas, ya chingue su madre, se cancela la semana, me voy a meter al bar y algunas mujeres atascarse de helado.

La pérdida del amor, es suficiente razón para perderse en el alcohol, como lo dicen muchas canciones, aunque tal vez esto sea como el huevo y la gallina, y nos embriagamos en los truenes, porque así lo dice la canción, o tal vez las canciones lo dicen, porque es lo que suceden; en fin, cuando sufres porque te dijeron “eres tú y no yo”, creo que así tampoco va, pero supongo que es lo que menos importa y el resultado es el mismo, cuando eso sucede, te pones hasta las manitas.

Aunque con la edad se aprende a lidiar con este tipo de desilusiones, aunque a veces, eso tampoco importa; pero el día de ayer, que venía en el metro jugando Candy Crush de gatitos, juro que esa madre es adictiva, unos jóvenes venían junto a mí, teniendo una conversación sobre vómito, sí, lo juro, hablaban de vómito, y junto a mí, la chica juraba y perjuraba que la dejaran vomitar, y que esta vez sí lo haría en la bolsa.

Obviamente yo estaba shockeada e indignada por esta juventud sin frenos, que hablan como vomitar en público y en bolsas, como yo lo haría sobre ir al cine.

¡Qué asco!, y lo que más me preocupaba era que me fueran a vomitar, así que estuve a casi nada de darles un sermón onda Señora metiche que no tiene Candy Crush en el celular y se mete en la vida de los demás, pero me estuve y pensé, total si me vomitan, pues del asco me vomito en ellos y empezaría así la feria del vomito en el vagón del metro.

Pero nada de eso paso, y mientras veía venir y esperaba a que me vomitará, la chica en cuestión comenzó a hablar de lo asquerosa que era su PUTA VIDA, así dijo ella, y esa percepción fatalista de la vida, de que nada tenía sentido, de que no valía la pena vivir, de que le daba un culo que la vieran así sus papás, y su épica peda en la cual olías el alcohol que ella transpirada a 20 metros, todo eso, fue por culpa del amor.

Ah, embriagarse por amor, que levante la mano quien no lo ha hecho.

Bueno, yo no lo he hecho, porque no tomo alcohol, pero en un sentido metafórico, también me he embriagado de amor, y me he embriagado por culpa de una ruptura sentimental, como lo dice la canción HABITS.

Todos hemos tocado fondo por una separación, todos hemos pasado días tan oscuros y tan malos, que nada parece sacarnos de esa zona, en la que buscamos cualquier cosa que drogue y ocupe la mente, a todos nos ha pasado sentir esa fuerte soledad porque alguien se ha ido.

Pero gente, hay que entender, que así es la vida, que ese sufrimiento es parte de vivir, y no es que haga comerciales de nadie, pero la neta, vivir es increíble, incluso con sus sufrimientos y ausencias; la vida, y el proceso de equivocarse, de reír, de caerse, de llorar, de aventurarse, simplemente es maravilloso.

Así que, cuando te truenen y te duela todo el corazón, y sientas que lo único que te mantiene vivo es estar HIGH, recuerda que así es la vida, que eso pasa, y que, si bien ahorita estás perdido pronto te encontrarás, y que eso que no tenía sentido, lo tendrá.

Lo que quiero decir, es que hay cosas que son dolorosas, como la menstruación que pasa cada mes y se sobrevive a ella.

Si alguien quiere emborracharse por amor o por lo que sea, puede hacerlo, solo hay que recordar, que todo eso pasa. ANIMO.

Yes

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com