Vida y Estilo

El metro por la mañana

Si eres como yo, que odias madrugar, seguro que te sientes identificado con lo que voy a contar. Así que ponte cómodo, coge un café y prepárate para reírte un rato.

¿A quién se le ocurrió la brillante idea de empujar a cientos de personas en un espacio cerrado y sin ventilación a primera hora de la mañana? ¡Gracias, genio del transporte público! Es maravilloso tener a un desconocido respirando en tu cuello y a otro aplastando tus pies mientras intentas mantener el equilibrio en un vagón abarrotado. ¡Qué privilegio!

Además, siempre hay alguien que decide que es buena idea llevarse su desayuno en el metro. Y no me refiero a un simple café para llevar, no. Hablo de personas que se traen su tupper con huevos revueltos y tocino. ¿En serio? ¿No podían esperar a llegar a casa para desayunar como personas civilizadas?

Y luego está el clásico “empujón mañanero”. Esa sensación de tener a alguien pegado a ti en el metro, respirándote en el cuello y empujándote cada vez que el tren frena bruscamente. ¿Es necesario estar tan cerca? ¡Déjenme respirar, por favor!

Por si fuera poco, siempre hay algún gracioso que decide que es buena idea escuchar música a todo volumen en sus auriculares. Y no, no es música tranquila para despertar suavemente, no. Es reggaetón a todo trapo a las 8 de la mañana. Gracias por despertarme de golpe, amigo.

¿Por qué llegar puntual a tu destino cuando puedes disfrutar de un retraso de 20 minutos en el metro? ¡Es mucho más emocionante! Solo piensa en la adrenalina que sentirás al correr hacia la oficina con el tiempo justo para no ser regañado por tu jefe. ¡Es como vivir en una película de acción!

Nada como empezar el día con una serenata de mariachis improvisada en el metro. ¡Qué bonito es escuchar a un grupo de músicos desafinados tocando “Cielito Lindo” a todo volumen a las 8 de la mañana! ¡Es como una inyección de alegría y energía para empezar el día con buen pie!

El metro por la mañana es el lugar perfecto para disfrutar de una amplia gama de olores corporales. Desde el clásico aroma a sudor mezclado con perfume barato hasta el inconfundible olor a café recién ingerido, no hay nada como respirar profundamente y saborear la esencia de la humanidad en su máxima expresión. ¡Qué delicia para los sentidos!

Y por último, pero no menos importante, está el clásico retraso del metro. Porque sí, el metro por la mañana siempre tiene retrasos. Y cuando ya estás apretado como sardina en lata, lo último que quieres es tener que esperar más tiempo del necesario para llegar a tu destino. ¡Gracias, metro, por alegrarme las mañanas!

Yes

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com

4 comentarios en "El metro por la mañana"

  • Lo bueno es que yo no uso metro, entre semana para ir y regresar del trabajo, solo lo uso los fines de semana y debes en cuanto.

  • Cuando voy me agrada usar el metro, porque con todo y todo, es mil veces mas eficiente, económico y puntual que el servicio de camiones que tenemos acá en el Estado de México, que esta horrible y con la posibilidad de que en el camión que abordes se vaya destartalando y echando carreras con otra unidad

  • cierto, yo prefiero por mucho el metro a los camiones
    por cierto bueno leerte por estos rumbos 😀

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