A veces en momentos tristes solo necesitas recordar una de las canciones de Gustavo Cerati más inspiradoras que pudo componer, una rola del 2006 en la época solista del cantante, una canción que se desprende del álbum “Ahí vamos”, un título que encaja perfecto con la etapa de las despedidas, de decir adiós para crecer y seguir viviendo, ya sabes, para decir “ahí vamos”, aunque tengas malas rachas, aunque tengas malos periodos, aunque te la pases escuchando canciones tristes para sentirte mejor.
Adiós, una canción para acordarte que hay cosas que son por tu bien, que hay cosas que deben pasar, que hay cosas que deben terminar. Pero más que una canción, esa se convirtió en una poderosa frase, la frase de las personas que sufren de amor; esas palabras que uno se repite, como una especie de consuelo para su desasosiego, tratando de hallar en la letra de esta enigmática canción llena de ecos que buscan ocupar vacíos para calmar el dolor de una perdida, para no perder de vista que siempre viene un nuevo día, para recordarte que decir adiós no es soberbia sino un acto puro de amor, para finalmente comprender que poder decir adiós es crecer.
Tal vez suene poético y maravillosa esta canción, tal vez estos días en los que nos tuvimos que despedir de este gran músico nos vino a la cabeza esa canción o tal vez, solo tal vez, en realidad decir adiós es crecer.
