Vida y Estilo

Decálogo del treintón: cosas que pasan a los 30

Llega un punto de la vida de todo joven treintañero, perdón, sin chistes, de todo treintón, en el que no lo puedes negar más, eres material que necesita reciclarse, en pocas palabras, estas viejo y por más que duela aceptarlo eres consciente de ello.
Simplemente ya no puedes negarlo más, haz envejecido sin punto de retorno y ahora sí, es una verdad absoluta, que nada ni nadie puede ocultar, ya no puedes aferrarte a tu juventud perdida hace muchos, muchos años. Digo, hay un punto en la vida, en la que no se puede tapar el sol con un dedo, así pasa con tus canas, con tus pocas ganas, tu falta de energía, tus dolores crónicos y todos esos achaques de viejitos que te van a delatar, eres un treintón, y lo que más duele es decirle adiós a los años 20, a todo ese exceso de vida, de ganas, de juventud, de inocencia; todo eso que te hacía acelerarte.

Y los 30, son los años más difíciles de la vida, porque no eres viejo, no te sientes viejo; pero tu cuerpo comienza a envejecer y lo más duro, es el contraste que existe entre ese exceso de vida que experimentaste la década anterior y la ruda realidad de enfrentar los años 30. Aunque bueno, no todo es malo de ser un treintón, por lo menos hay solvencia económica, por lo menos; además, comparando las etapas de la vida, el contraste entre decirle adiós a los 20 y entrar a los 30, creo que es el más difícil de la vida, bueno, eso creo, quien sabe cómo piense cuando entre a los cuarentas y tenga que decirle adiós a mis treintaytantos.

Bien, no es malo envejecer, o eso nos repetimos los treintones en plan aceptación triste, es más, hasta adaptamos el monologo de Ralph el Demoledor, ese increíble monologo sobre ser malo para entender que ser malo no es malo, ay, perdón, no es malo ser viejo.

Soy viejo y eso es bueno, yo jamás seré joven y eso no es malo, no quiero ser nadie más y soy feliz

Aunque no me malentiendas, no me quejo, mucho; ahora veo que mi vida tiene otras facetas, soy más experimentada, más sabia, más práctica y más compleja en un buen sentido y todo eso llega con la vejez; sin embargo aceptar que la juventud se pierde, que la energía se va, que las ganas se esfuman, eso es algo muy difícil de aceptar.

A los treintones nos gusta y no nos gusta esta década, la disfrutamos tanto como la sufrimos, supongo que esa es la razón por la cual nos aferramos a todo rasgo visible de juventud; pero la vida pasa, las arrugas llegan y las energías se van; por más que lo neguemos hay cosas que nos pasan a todos los que tenemos 30, cosas que se convierten en el Decálogo del treintón

1.No importa lo que hagas, siempre terminas cansado a las 10 de la noche
2.La fuerza de gravedad surge efectos en ti y todo se cae
3.La vejez comienza a ser visible y las arrugas, las canas y la flacidez se apoderan de tu cuerpo
4.Ahora te diviertes de manera diferente y eso incluye una botella de vino, una charola de quesos y platicas en volumen moderado
5.Las fiestas ya no son como antes, ya no puedes irte toda la noche a bailar o beber, necesitarás muchas pausas y descansos intermedios
6.Las pláticas que un treintón tiene son sombre el futuro, la familia, estar casado, los hijos y las próximas vacaciones de familia
7.Lo que más extrañas en la vida es tener 20
8.En los 30 te preocupas más por tu digestión y el estreñimiento
9.Te vuelves más apático y más gruñón
10.Vas a preocuparte más por ir al médico, es más, te harás su amigo

Yes

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com

3 comentarios en "Decálogo del treintón: cosas que pasan a los 30"

  • Parece que hablas como si tuvieras 60, deportistas de 30 años la rompen, músicos de 30 duran más que hasta las 10 de la noche, la gente de 30 años se ve joven, sería raro ver a un treintón canoso y flácido y arrugado, sobre la forma de divertirse cada quien la elige, uno de 20 años también puede divertirse con una botella de vino, una charola de quesos y platicas en volumen moderado. Si a los 30 la pintas así, no me imagino a los 40, 50 o 60, ufff, con 30 en vez de quejarte puedes conquistar el mundo. Y cuando tengas 40 o 50 vas a desear tener 30 y ser joven de nuevo, mejor aprovechar.

  • interesante…ahora mi pregunta: porque no me ha pasado nada de esto??? ¿soy un alien? ¿un sayayin? la única razón por la que no voy a ciertas fiestas, es porque me da un poco de verguenza si hay muchas jovencitas….y sería, todos son unos exagerados en serio…

Los comentarios están cerrados.