Dar por hecho algo

En serio, que alguien me diga y me explique con manzanas porque se dan por sentado las cosas y también a las personas, de tal suerte que dejamos de luchar por eso que tenemos, pensando que las cosas, incluyendo a las personas, son algo seguro y sin hacer nada, seguirán ahí a nuestra disposición.

Cuándo fue, cuándo paso, cuándo sucedió, que olvidamos la valiosa lección de que todo en esta vida cuesta y merece un trabajo, en que momento paso, que dejamos de ser activos para mantener aquello que tenemos, acaso como la respuesta tiene que ver con el hecho de que ya es nuestro, entonces para que seguir haciendo algo, ¿será?

Bien, puede ser que esa sea la lógica detrás de dar por hecho algo, pero hay que tener en mente que ni las cosas, ni las personas, ni las oportunidades son eternas y pensar que se cuenta con el amor, confianza y compañía de alguien perpetuamente es un grave error, porque hay que esforzarnos por esas personas siempre.

Esto es fácil, una persona super fit, sabe que, si quiere mantener su cuerpo ultra estético, debe esforzarse diariamente en esa meta, lo mismo sucede en el trabajo, y si quieres lograr grandes metas, hay que hacer algo que te mantenga en esa posición, todo en esta vida requiere un esfuerzo, y lo sabemos; pero suele pasar que hay cosas que damos por hecho, o por sentado pensando que siempre estarán ahí, cuando no es así.

Cariño, personas, metas, trabajos, y hasta un cuerpo esbelto son cosas que requieren un esfuerzo constante diario, porque si se deja de hacer, eso se pierde.

Hace poco escuchaba con fascinación a una persona hablar sobre este tema y el cómo dejamos de apreciar esas cosas que tenemos en fácil acceso, y la plática iba en un sentido profundo y básico y, de hecho, somos la generación de personas que incluso dejo de disfrutar de la comida, es algo que se hace tanto y diario, que para que valorar o poner atención en algo tan monótono y rutinario.

Puta imagínate si algo tan placentero como disfrutar con todos los sentidos de comer se da por hecho, imagínate cual es el destino de las demás cosas, y que puede esperar un buen amigo, tu pareja o tu familia, si ya nada se disfruta, si ya nada merece un esfuerzo.

Dar por hecho algo es peligroso, porque nos olvidamos del esfuerzo que nos tomó conseguir ese algo, y hablando de personas, es aún más peligroso pensar que las personas están ahí simplemente porque en el pasado algo hicimos que nos mereció su afecto.

Hay que recordar que activamente hay que luchar y esforzamos por las personas que queremos, porque el cariño no es eterno, ni mucho menos infinito y estar con alguien es un trabajo diario, de tiempo completo.