Vida y Estilo

Cuando tú quieres trabajar y todos te distraen

Alguna vez te has sentado en tu escritorio, mesa de trabajo, el lugar donde haces la magia, arte y haces tu trabajo; de esas veces que estás concentrado, estás dispuesto a dar lo mejor de ti, a trabajar sin descanso y arduamente concentrado haciendo una cosa, y planeas hacerlo de la mejor manera de esas veces que abres Spotify para escuchar el playlist recomendado para concentrarte, volteas tus celulares para que la pantalla mire al escritorio y no puedas ver las notificaciones y al mismo tiempo apagas el sonido para que nadie te interrumpa, mucho menos una notificación.

De esas veces que cierras todas las pestañas que puedan distraerte con algo, porque estás dispuesto a trabajar, a trabajar como nunca antes lo has hecho en una larga jornada de concentración y mucho trabajo sin procrastinar nada, solo trabajando.

Bien, a mí me pasa diario, siempre tengo esa disposición para trabajar, al máximo, pero siempre me enfrento al mismo problema, que seguro también te has topado con él, cuando tú quieres trabajar y todos te distraen y si no es el celular con sus muchas tonterías, es alguien ahí que te interrumpe, que te habla, y hasta te tocan para sacarte de la concentración.

Y por cierto, no me refiero a que te toquen de una manera inadecuada, por favor, hablamos de distracción, no acoso sexual, yo me refiero a esa parte del día cuando estás bien concentrado, con tus audífonos puestos a máximo volumen para así desconectarte de todo y alguien que definitivamente quiere tu atención se acerca a ti, te habla, pero al darse cuenta de que tienes la música tan alta, tendrá que hacer algo más para captar tu atención y normalmente es tocarte o interactuar contigo ya sea moviendo tu brazo, tocando tu hombro, tu espalda o algo similar.

Bien, hacer eso es efectivo, pero hay personas que no les gusta para nada que las toquen, ni siquiera el hombro y lo sé por experiencia, no hay nada que me moleste más que alguien me toque el hombro sin mi autorización.

Definitivamente, odio que me toquen el hombro; sin embargo, hay personas que necesitan captar tu atención.

Ahora, una cosa es estar en el MODE trabajo intenso y nadie me va a interrumpir y que eso pase, porque normalmente por más que voltees el celular, cierres pestañas y tengas el playlist correcto, a veces la curiosidad te hace mirar al celular y con ese solo vistazo ya valió gorro todo el esfuerzo por concentrarte y pasarás horas contestando mensajes que no harán nada por tu vida, de una persona que está aburrida y no te aportará nada.

De esas veces que sabes que hasta con un virus te distraes, pensando si o lo abres o no.

Cuando comienzas a distraerte comienza el principio del caos y ya únicamente crees en ver tus redes sociales, en ver qué hay de nuevo en netflix o a ver a quien te encuentras en facebook.

Ese momento, cuando tú quieres trabajar y todos te distraen, es el comienzo del caos, porque exclusivamente necesitas una pequeña distracción para olvidarte de todos tus propósitos del día y caer en la tentación de la distracción.

Yes

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com