Cuando no quieres que alguien vea la pantalla de tu celular

Haces lo imposible en plan contorsionista para que nadie vea lo que estás haciendo, ya sea una conversación, un video con contenido susceptible, una foto o una pendejada nueva; a veces simplemente no quieres que vean lo que estás haciendo y haces de todo, girar, subir, saltar, lo que sea, para que tu pantalla tenga privacidad y obvio, nadie pueda juzgarte por lo que estás haciendo.

Además por dios, por favor o por lo que sea, PRIVACIDAD, GENTE, PRIVACIDAD, hay cosas que quieres guardar para tí, únicamente para ti y muchas de esas cosas privadas, son porque te avergüenzan hasta la médula, que alguien más las sepa, pero hay gente tan curiosa, que aunque gires como contorsionista para que no vean, ellas siguen tu trayectoria, como la luna siguiendo a la tierra, para ver que estás haciendo y creo que genera curiosidad, cuando no quieres que alguien sepa algo, entonces esa persona decide que quiere saber.

Que por cierto, como tip, cuando estás en plan incógnito con el contenido de tu celular, solo fijate que atras de ti no haya superficies reflectoras, porque todo lo que hagas será en vano y el espejo o lo que sea, reflejará eso que con tanto empeño pretendes ocultar.

Que por cierto, hablando de lo incógnito, amo el modo incógnito de Chrome, es genial para no dejar rastros de tu actividad, búsquedas, los videos que checas o las cosas que haces; ya sabes, por aquello de que no quieres que nadie se entere de lo que haces, mucho menos google, que ese historial de búsquedas podría perjudicarte y crearte un escándalo de proporciones épicas, así mejor en modo incógnito, como cuando estas en el celular y no quieres que los demás vean lo que estás haciendo.

Cuando no quieres que alguien vea la pantalla de tu celular

Que por cierto, siempre se me hizo una gran reverenda payasada, esas posturas extrañas para que los demás no vean la pantalla de tu tablet o smartphone, y normalmente veía a mi prima, hacer ese tipo de contorsiones extrañas, pero el otro día, pase justo por esa sensación de: “wey, a tu pantalla, ve tu pantalla”