Mucho se ha oído sobre los beneficios del té, incluso cuando no sabes nada de esta bebida que se puede tomar caliente o fría; todos sabemos que es bueno para la salud, es más, cada día se descubren nuevas propiedades que hacen que más personas se hagan fanáticas de esta bebida, y no, no es una moda que impuso el Starbucks con el té chai latte.
El té en todas sus variedades está conquistando al mundo desde los chinos, los ingleses para convertir a ciudadanos del mundo en bebedores de té, posicionando a esta bebida aromática como la segunda bebida más tomada en el mundo.
Pero sin importar lo rápido que se populariza el té, para muchos esta es una bebida de sobre, que compras en el supermercado; para esas personas todo lo que se caliente en agua es té, sin embargo esas personas se sorprenden cuando descubren que solo puede llamarse té, aquellas preparaciones que son hechas con hojas, así se desprenden las 5 categorías de té que incluyen:
•Té blanco para la juventud y mejorar la memoria
•Té verde depurativo
•Té azul o té oolong reduce tensión y colesterol
•Té negro con antioxidantes
•Té rojo con acciones quemagrasa
Así que todo lo demás que incluya flores u otras cosas, esas se llaman infusiones o tizanas y normalmente tienen un tono y aroma muy frutal.
Y como es divertido y está de moda eso de tomar té, cuando me invitaron a una cata de té, dije que sí, para aprender más sobre esta bebida, para disfrutar de sus aromas y para enamorarme de esta bebida y aprender a tomarme mi tacita de té todas las tardes, pero no de sobre, sino como debe ser, natural y fresco, porque debo confesar que yo soy una de esas personas antipáticas, fuera de moda y fuera de onda que odia el té, ni de sobre, ni de cualquier manera, NO ME GUSTA ESO DE TOMAR AGUITA CALIENTE CON UN LIGERO TOQUE HERBAL, no me gusta, pero siempre es un buen momento para cultivar la mente y educar el paladar hoy una cata de té, mañana una taza de té verde y luego el mundo, MUAJAJAJAJAJAJAJA.
Nota para el lector: a partir de este momento el post que usted está leyendo cambiara de giro y de ser algo serio y educativo se convertirá en una opinión intrascendente de su escritora favorita, o sea, yo.
Definitivamente yo no sé nada, pero nada, de lo que es absolutamente nada de té, y me estoy quedando corta con lo que te estoy diciendo y no sólo no es que no sé nada de té, realmente no tengo la menor intención por saberlo o gusto por tomarlo.
Sé que está de moda, sé que es la bebida por excelencia de una vida saludable; la bebida que está compitiendo directamente con el café por popularidad por los beneficios que ofrece a la salud, pero no sé si yo sea muy naca, muy inculta y con un paladar ignorante, pero a mí él te me parece una bebida intomable.
¿Qué es eso?, agua caliente con sabor extraño.
Lo que yo pueda decir en este punto sólo denotara ignorancia y tal vez conocimiento de la bebida, pero se los juro, no me gusta para nada su sabor. Lo dice alguien que no toma vino, café, licores, alcohol, destilados, refrescos, aguas de sabores y demás, lo dice alguien que únicamente toma agua, así que por ello, deben ser un poco indulgentes conmigo.
Porque se los juro, para mi tomar té, es como tomar medicina caliente y más que ahora la tendencia es tomarlo sin azúcar, no juegues, le quitan a mi té, lo único que lo hace llevadero, UN MONTÓN DE AZUCAR, pues entonces ¿cómo?
Así me sentía yo ayer en la cata de té, mientras todos tomaban sorbos de té oolong y te rojo, haciendo ruidos extraños con la boca mientras sorbían la bebida y le daban aire en la boca para descubrir sus notas y sabores. Yo me sentía ignorante y fuera de lugar, porque entre más intentaba disfrutarlo, entenderlo y comprenderlo menos podía hacerlo, era agua muy caliente con un mal sabor, con un aroma extraño.
Supongo que yo soy una naca de closet, espera, no soy una naca de closet, soy una naca confesada porque te lo juro, para mí el té oolong sabía a té de pies y el té rojo sabía a té de pescado, que por cierto, nunca he probado, lamido, chupado o algo similar con un pie, pero imagino que así deben saber; un sabor tan invasivo y desagradable que solo puedo entender que el té es un gusto adquirido con el tiempo, porque mientras todos disfrutaban de su té, yo hacía lo que fuera para no tomarlo, es más, me puse a dibujar en plan niña con síndrome de falta de atención.