Aprende a definir el perfil de tu cliente ideal para generar más ventas

Uno de los aspectos más importantes que se debe tener en cuenta a la hora de generar ventas es conocer a los consumidores y saber definir al cliente ideal, pues intentar vender los productos y servicios a personas equivocadas puede ser un error que conlleve a pérdidas. 

Como emprendedores, muchas veces tendemos a decirle sí a cada oportunidad que se nos presenta en el camino, sin detenernos a pensar si valdrá la pena o no; cosa que definitivamente no se debe hacer, puesto que estaríamos poniendo en riesgo la estabilidad del negocio, y es aquí donde radica la verdadera importancia de saber reconocer al cliente potencial.

Ser capaz de identificar el mercado objetivo al que se dirige tu negocio te permitirá crear y llevar a cabo una estrategia de marketing eficaz para captar y fidelizar clientes. Sobre todo, considerando el hecho de que no todas las personas están interesadas en lo que estás dispuesto a ofrecerles. Es por ello que, en esta oportunidad estaremos evaluando todas aquellas características que componen a los consumidores, de manera que puedas encontrar a los usuarios que se ajusten a tu nicho y sistema de trabajo y que estén dispuestos a apostar por tu marca.

¿Qué es un cliente ideal?

Podemos definir a un cliente ideal a aquella persona que decide comprar algún producto o adquirir un servicio porque ha encontrado en él la solución a sus necesidades. En este sentido, el usuario siempre valorará el trabajo de la empresa, convirtiéndose en un seguidor fiel de la marca. Por lo general, el cliente ideal cumple con los siguientes aspectos:

• Se siente satisfecho con el producto o servicio que ha adquirido.
• Tiende a recomendar los servicios de la empresa, ya que han sido capaces de resolver sus problemas.
• No discute por los precios establecidos, pues los consideran adecuados por el valor que le aportan.
• Escoge a la marca en cuestión por encima de las demás.

Dirigirte a este tipo de clientes potenciales, te ayudará a mejorar distintos aspectos de tu negocio, como es el caso de la comunicación entre ambas partes, permitiéndote comprender cuáles son sus deseos y necesidades y en base a ello enfocar tus estrategias de venta.

Sin un perfil de cliente ideal definido será muy difícil alcanzar los objetivos planteados en tu negocio, pues cualquier acción que realices será ineficaz. En pocas palabras, conocer la personalidad de tu cliente ideal te dará el poder de enfocarte directamente en las personas que están buscando tus servicios.

Tipos de clientes

Para poder definir quién es el cliente que mejor se adecúa a tu estilo de negocio, primero debes conocer cuáles son las categorías en las que se engloban los consumidores; esto te permitirá tener una visión más clara del público al que debes apuntar. Veamos los diferentes comportamientos que pueden tener los clientes.

Los que apuntan a las ofertas

Su objetivo principal es encontrar la mejor rebaja del mercado. Por lo general, este tipo de clientes buscan regatear precios para que su compra les salga lo más económica posible, por lo que, si planeas llamar su atención, tendrás que competir con los demás negocios que trabajan bajo el modelo low-cost.

Si estás comenzando a dar a conocer tu marca, esta estrategia podría servirte de gran ayuda; por ejemplo, si tu tienda se dedica a la venta de dispositivos móviles, podrías aplicar promociones especiales como descuentos en la compra de cierto producto u obsequios como recargas telefónicas al superar algún monto en específico.

Los que buscan todo gratis

Este tipo de personas se caracterizan por querer obtener todos los beneficios de la marca sin tener que pagar ni un centavo a cambio; lo que supone un elevado coste de mantenimiento para satisfacer sus exigencias. En estos casos, lo más recomendable es evitarlos a toda costa, pues de lo contrario se convertirán en cargas para tu negocio, generándote pérdidas y no beneficios.

Los que evalúan la relación calidad – precio

Los clientes que consideran la relación calidad – precio como un aspecto determinante para concretar sus compras se encuentran en esta categoría. Este tipo de consumidores buscan obtener resultados placenteros a un precio justo, es decir, tu producto debe aportarles algo de valor para que se sientan motivados a comprarlo. Lo bueno de estos clientes es que respetan y comprenden los procesos por los que pasa la marca para ofrecer tales productos. 

Los que se enfocan en los resultados

Estos tienden a ser los clientes más exigentes en términos de evaluación de calidad, pues su finalidad es obtener productos y servicios que garanticen excelentes resultados, sin importar el precio que tengan que pagar. Este tipo de clientes puede generar grandes beneficios a tu negocio, pero a cambio debes estar dispuesto a ofrecerles el mejor servicio de todos, por lo que necesitas enfocarte en su atención.

Si tu objetivo es captarlos asegúrate de hacerlos sentir cómodos y seguros, pon a su disposición tus mejores cartas y considera incluir diversos métodos de pago como transferencias bancarias, pagos con QR, cobros con tarjetas, entre otros medios, de manera que no se te escape ninguna oportunidad de concretar la compra.

Básicamente, estos son los principales tipos de clientes que podrás encontrar en el mercado. Determinar cuál de ellos se adapta mejor a tu modelo de negocio va a depender de ti y tus objetivos planteados. De igual forma, debes tener claro que definir alguno de estos arquetipos no quiere decir que estés excluyendo a los demás, solo se trata de darle un enfoque más preciso y saber a qué tipo de público debes dedicarle más tiempo, dinero y esfuerzo.

Tips para definir el perfil de tu cliente ideal

Teniendo en cuenta todo lo anterior, es momento de compartirte algunas recomendaciones que te ayudarán a describir en profundidad a tu cliente ideal.

Lo primero que debes hacer al momento de estudiar a tu público objetivo es recabar toda la información posible acerca de ellos; ya que esto te servirá para definir una estrategia de venta, mejorar la imagen de marca que buscas transmitir y crear el contenido más adecuado según sus expectativas.

En este sentido, debes comenzar con los datos básicos del usuario como su edad, género, localización, profesión, ingresos, intereses y pasatiempos. Una vez que hayas recopilado tal información, deberás profundizar un poco más y evaluar los aspectos que consideran importantes para confiar en una marca, qué canal suele utilizar para compartir información o recomendaciones con sus amigos, saber si utiliza redes sociales y la frecuencia con que lo hace.

También es importante tomar en cuenta los factores psicológicos como sus necesidades e intereses prioritarios, sus preocupaciones y miedos, sus ambiciones, sus objetivos, su nivel de satisfacción, qué tipo de experiencia espera conseguir cuando se interesa por un producto y/o servicio, entre otros aspectos. Mientras más información de los usuarios tengas más fácil será poder conectar con ellos.

Luego de realizar tu investigación, tendrás que diseñar el prototipo de persona para crear el perfil de tu cliente ideal. Este debe ser un resumen de las características principales de muchas personas reales que engloban a tu cliente potencial.

Tal creación deberá incluir una descripción muy detallada que vaya desde un nombre e imagen hasta sus hábitos, preferencias y todo aquello que lo defina como individuo. Y es así como después de tanto trabajo, obtendrás el perfil de tu cliente ideal.