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El amor debe sentirse como estar en casa

Mucha gente se pregunta, ¿qué es el amor?, y este es un debate filosófico tan intenso como denso, en el que ni Aristóteles, ni Platón podrían ayudarte con una respuesta, también de tono filosófico; porque el amor es de esas cosas que no comprendes, por más que te las expliquen, es hasta que lo sientes, es hasta que vives el amor, que puedes saber que és y aún sintiéndolo, poder explicarle a alguien que es el amor, resulta difícil; porque tratar de describir el amor, es como intentar explicarle a un ciego los colores y sus matices, las expresiones que alcanza, es como intentar explicarle a un sordo con señales, lo que es el sonido.

Supongo que así pasa con el amor, cuando no lo experimentamos somos un poco ciegos y sordos; aunque bueno, también no hay que negarlo, cuando estamos enamorados somos un poco necios.

Pero si te estás preguntando y entonces cómo sabes que es el amor, pues hay una forma muy clara para saber lo que es, y la respuesta está en lo que sientes.

El amor debe sentirse como estar en casa, es ese momento de seguridad, es esa confianza, es saber dónde estás parado sin sentir miedo.

Ahora, lo sé, tal vez suene algo cursi, romántico y medio baboso, pero si lo piensas, si lo analizas por un momento, aunque sea solo un poco, no necesitas comprender al amor, no necesitas entenderlo, no necesitas saber que te pasa, solo necesitas saber cómo te sientes y sentir ese sentimiento embargante de estar cómodo.

Es muy raro, pero estar enamorado es una locura, en el que las resplandecientes luces pueden cegarte y hacer rebotar por el borde del cielo, hacer que sientas la energía de la otra persona bailando a tu alrededor, es sentirte vivo, es sentir que tu sangre comienza a calentarse, y no porque andes caliente o cachondo, sino porque empiezas a vivir, empiezas a sentir, se siente como un lugar cómodo para descansar cuando es tarde, ese lugar donde puedes cerrar los ojos, ese lugar en el que todo brilla como el oro, aunque caiga la noche y el mundo se haga frío, es sentirse en casa, fuera de casa.

Eso es lo que debería hacerte sentir el amor, cualquier cosa que no lo sea, es cualquier cosa, menos amor.

Y no necesitas que alguien te lo explique, solo debes saber que es lo que se siente y cuando lo sientas, tienes dos opciones, negarlo o abrazarlo con muchas fuerzas, para por fin estar en casa.

El amor debe sentirse como estar en casa

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