Filosofando

A veces algo es mejor que nada

Y no siempre pienso así, de hecho, es muy curioso, pero en algunas cosas de la vida, lo quiero todo mejor que algo, digo, prefiero nada que solo algo, ya no supe qué dije, pero entendiste lo que quise decir, espero.

Hoy por la mañana me sucedió algo raro, justo cuando desperté en ese momento pensé que esa filosofía de vida, era la mejor idea del mundo, es más, pensé en patentarla, escribir libros de autoayuda, hacer merchandising y una línea de coaching que se guiara bajo es gran máxima, esa filosofía de vida que todos en el mundo deben adoptar como propia:

A veces algo es mejor que nada

No sé si me pareció la idea del millón de dólares porque era muy temprano en la mañana o en verdad es una idea millonaria pensar que a veces algo es mejor nada. Puede que esta sea una buena práctica de vida que te conduzca a algún lugar, uno bueno, espero. Pero justo cuando seguía repitiendo eso como mantra, vino a mí un shock, un gran impacto que me conmociono y es que esa gran filosofía de la vida, sin contexto, sonaba a la práctica más derrotista y conformista del mundo.

Entonces me puse a pensar más y más, por el hecho de que yo soy muy exigente conmigo y con los demás, con las expectativas que tengo de la vida y lo que quiero obtener de todas las situaciones que experimento.

Al comienzo de este artículo decía que yo lo quiero todo, y es cierto hablando en cualquier ámbito, mis aspiraciones siempre son altas, con expectativas también de altura, siempre estoy en la búsqueda de obtenerlo todo, porque siendo honesta, no soy de esas personas que se conforman con cosas a medias; pero creo que todos somos así, todos tenemos una idea clara y fija de lo que buscamos en la vida y no nos conformamos con menos, supongo que por ello terminamos exigiendo y cuando no obtenemos eso que queremos, nos decepcionas y nos retiramos. Obvio, si no tengo aquello que busco, como lo busco, entonces no quiero nada, y no lo niegues, también así eres tú, porque la idea mental de lo que queremos es tan fuerte, hablando de relaciones, trabajo, metas e incluso objetos materiales que no podemos desistir de ella.

Tenemos una idea muy clara de lo que buscamos y si algo no cumple esas expectativas, entonces no lo queremos.

Y esa forma universal de ser, contradice la gran máxima que se me ocurrió en la mañana, porque no nos conformamos con cosas a medias, queremos todo y si no lo podemos obtener mejor que no nos den nada, podemos esperar, somos pacientes y con mucho tiempo para que llegue eso que queremos, como un todo y no una parcialidad.

Entonces, si nuestra naturaleza humana es NUNCA CONFORMARNOS CON LAS COSAS, como podía ser que yo estuviera diciendo que a veces algo es mejor que nada.

La clave en esta máxima es entender las palabras A VECES.

Cuando estamos en la búsqueda de algo, nunca nos conformamos y siempre exigimos a los demás y por supuesto con más énfasis a nosotros, que las cosas sean como creemos, que deben ser; y a veces eso nos evita ser felices, nos evita hacer las cosas, nos evita experimentar emociones y nos evita lograr las metas que buscamos de la vida.

Nos exigimos ser les mejores, TODO O NADA, y si estamos a medias es lo mismo que si hubiéramos fracasado, pero pensar que el vaso está medio lleno o medio vacío de forma absoluta, solo nos confunde.

Y todo esto pasó porque no quería ir al gym, mi plan era pararme temprano para irme a hacer 2 horas de ejercicio, como cada día de la semana, pero por x o y, se me hizo un poco tarde y en vez de hacer esas 2 horas, ya solo tenía tiempo para ir 1 hora 45 minutos, eso me hizo taparme con todas las cobijas y decir, mejor no voy.

Pero luego abrí los ojos y me dije: A veces algo es mejor que nada y me pare.

Hablando de logros, de metas, de intentar hacer algo que cambie mi vida, a veces algo es mejor que nada; a veces es mejor 1 hora, 45 minutos de ejercicio, que cero minutos de actividad física; a veces es mejor algo que nos ayuda a ser mejores que quedarnos sin hacer nada.

Esta filosofía de a veces algo es mejor que nada, es igual que ver un vaso medio lleno o medio vacío; supongo que habrá veces en las que necesite todo o mejor me retiro, pero a veces, solo a veces ese algo, puede ser una gran diferencia.

A veces intentar algo, es mejor que no hacer nada.

Yes

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com