Amor y Sexualidad

Adictos al amor

Hay gente adicta al sexo, pero también hay gente adicta al amor.

Creo que por fin lo he logrado, por fin supere mis problemas de adicciones personales.

Lo peor y más miserable del asunto es que no estoy hablando de adicciones a alcohol, drogas, tabaco o sexo, yo soy adicta a las personas. Tal vez tenga que ver con un problema más serio de un trastorno de ansiedad, onda “obsesión compulsión” en el campo de las personas, porqué yo no me obsesiono con objetos o patrones de conducta, yo me obsesiono con personas, con su ensoñación, con su atención y con todo tipo de comportamientos malignamente patológicos que se generen.

Es eso o simplemente soy muy tonta y me enamoro del amor para cualquier cosa y en cualquier momento.

A lo mejor es eso, y adoro sentir la sublime emoción de estar enamorada, pero yo solo hablo de la etapa del enamoramiento ya que después me harto y emigro a nuevas tierras que me ofrecen amor de verano, libre, cálido, lleno de ternura y pasión, pero sobre todo amor efímero, tal vez sea miedo al compromiso o me encanta enamorarme del amor.

No importa la persona, claro está, si es atractiva, gentil y buena onda mejora la experiencia general, pero en si mismo, yo amo amar incondicionalmente tan fuerte y libre que lo doy todo en una explosión de sentimientos, obvio, después de la semana dos estoy hasta el gorro de la misma persona que me está sofocando. Asimismo descubrí otra cosa más, si lo sé, soy una cajita de monerías, descubrí que entre más mal me trate una persona, más se niegue a cooperar y darme su atención más me pongo necia en lograr su afecto, pero no creo ser yo nada más la que cae en este juego del “sí, no”, me parece que todos entre más se nos diga que no, más tenemos la estúpida necedad de lograr un sí, como sí la vida se nos fuera en ello. Lo único que queremos es un SÍ con imperante necedad, tanto así, que podemos esperar tres años para que la persona que creíamos “es el amor de nuestra vida” nos de un pequeño chance, pero cuando conseguimos esa oportunidad que tanto perseguimos durante tanto tiempo, ya no tiene sentido, es más hubiera sido más sublime y perfectamente romántico esperar 100 años sin nunca obtener lo que al corazón le parecía tan preciado, a diferencia de obtener un si en tres cortos años.
Cuando llega el sí, parece que es muy tarde ya o tal vez no sea tarde, sino simplemente queremos lo que no podemos tener, es eso y solo eso; como decía Arjona en una de sus canciones.

Al parecer me está por llegar el sí, la verdad espero que no sea así, no sabría qué hacer con un SÍ, no sabría cómo manejarlo a pesar de que durante muchos meses lo imagine como si fuera perfecto, ahora no lo quiero, a lo mejor si me dijesen que no, mi interés se reavivaría a lo mejor no, pero creo que ya no me interesa un sí, y sobre todo después de escuchar una segunda opinión y tener alternativas, tener la alternativa de estar con alguien más.

Esas son palabras mágicas, alternativa y opiniones externas; millones de dólares pagan anualmente las corporaciones para obtener estas dos partes de una ecuación matemática perfecta. Con ellas, las acciones que emprende un Gerente o CEO son de éxito al cuadrado, por qué no hacer lo mismo yo.

Normalmente SIEMPRE todos tenemos alternativas y, las segundas opiniones abundan por todos lados pidiendo a gritos ser escuchadas, pero claro, hay que ser bien listos para escuchar las opiniones valiosas y proactivas para elegir las alternativas con más opciones de victoria.
La verdad, tú, yo y todos tenemos estas dos herramientas del éxito a nuestro favor, lo realmente difícil es distinguirlas de entre un millón en vez de conseguirlas, ya que están ahí, solo es cuestión de mirar con mucha atención y ser pacientes, muchas veces no es la mejor idea saltar cuando veamos algo medianamente bueno sino ser sabio y prudente.

Seguramente estas pensando que tiene que ver “segundas opiniones” con todo este choro, pues sí no lo ves, estas medio ciego, tiene todo que ver.

Pero ¿qué es una segunda opinión?, hace rato estaba divagando sobre un problema existencial de amores que tengo, un problema que no había dicho en voz alta hasta el domingo pasado cuando ventile mi gusto por cierta persona “prohibida” para mi, y me empezaron a llegar opiniones por todos lados como aguaceros que no se dejan esperan y llegan con furia, para anunciar sus posturas con voz clara y fuerte, a pesar de lo que se diga por ahí que no escucho y que me vale madres todo, no es cierto, sí escucho con atención todo lo que se me dice.

Pero al igual que cuando tienes un diagnostico medico fatal o muy malo sobre cierta enfermedad, lo mejor antes de hacer cualquier cosa que afecte tu integridad física, lo más adecuado es visitar a otro experto, es más hasta un tercero para pedirle un panorama objetivo sobre la situación que enfrentas y como darle la cara para salir de la mejor manera posible.

Al tener varias opiniones uno puede discernir de manera más adecuada sobre lo que es mejor para sí mismo, tal vez un medico sea fatalista y los otros sean optimistas en cuanto al progreso de la enfermedad, obvio si se visitan 3 y el diagnostico es el mismo, ni le sigas amigo, podrías visitar 100 y seguirías sentenciado a muerte.

En este caso la segunda opinión no es de vida o muerte, simplemente es cuestión de felicidad o infelicidad, no mueres, pero si mueres en vida. Mis diagnósticos fueron negativos; lo mejor es buscar otra cosa que hacer con alguien más.

La verdad no entiendo porque me emperre con esa situación, todos podemos ser felices, es solo cuestión de intentarlo y siempre darse la oportunidad para hacerlo, al fin de cuentas puedes terminar con una grata sorpresa esperándote en la puerta.

Por lo pronto hare caso a la segunda opinión, obviamente una opinión externa y no mía sobre lo que es mejor, dichosamente en este momento de mi vida tengo alternativas y aparentemente escuche un diagnostico de vida duro pero a la larga positivo.

Sea cual sea el resultado de mis incógnitas algebraicas y mis problemas médicos de amores, ha regresado mi inspiración y lo mejor de todo es que se ha abierto un panorama lleno de expectativas emocionantes y arriesgadas que voy a tomar sin pensarlas mucho, a menos claro está, que venga el experto y me de su segunda opinión.

Yes

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com