Música y Conciertos

Mi placer culposo Felices los 4 de Maluma

Yo sé, nadie me imagina escuchando reggaetón en mi tiempo libre, principalmente por aquello de que mis gustos musicales se ubican en la sección de dance y trance; luego está el hecho de que me veo medio intelectual y para muchas personas, como que son cosas opuestas y contradictorias, y, además, el reggaetón es uno de los géneros musicales más satanizados, más criticados, más perseguidos, más polémicos, en fin, si quieres generar una bronca épica, solo tienes que decir “me gusta el reggaetón” y veras el mundo arder frente a tus ojos.

Ahora todos critican al reggaetón, sobre todo por sus sórdidos orígenes en los que todo se resumia a “dame más gasolina”, además el perreo no ayuda para nada; pero hay que aceptarlo, muchos músicos de la onda pop, se están mudando a este género, para hacer canciones bien prendidas cuyo ADN hará que muevas las caderas, obvio, habrá quien las mueve perreando, habrá quien simplemente se mueva, porque esta música es adictiva, es un gusto culposo que a todos nos convence.

Esto del reggaetón es como leer el TvNotas cuando estas formado en el súper, no es óptimo, no es ideal, no cultiva mucho tu mente, pero vaya carajo, como te entretiene y te alegra el día, así pasa con el TvNotas y el reggaetón, en mi caso mi placer culposo es Felices los 4, una canción sumamente polémica, criticada pero no hay como negarlo, es bien pegajosa y, además:

No me importa el que dirán, me gusta a mí.

Lo sé, la canción es loquísima, y muy criticable, mendiga canción, es pegajosisima y me hace bailar feliz mientras canto “felices los 4”, lo sé, no es ideal, no es óptimo, no es muy glamoroso, pero ese boom, boom se me pego, así como me ha pasado con otras canciones sumamente pegajosas de reggaetón y hay que reconocérselo a Maluma, su voz se oye muy bien en esta canción que está bien rimada, eso que ni qué.

Pinche canción, es un gusto culposo y una vez la oyes se te mete en la cabeza y ya no se te sale.

Yes

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com