La importancia de la música

Estoy convencida de que no soy la única, estoy segura, tanto que podría afirmar que muchas personas conocen el poder de la música, y no estoy hablando de esta industria en función de fama o dinero, no, yo hablo de algo más básico para partir de lo particular a lo general, la música en nuestra vida, la música para expresar nuestras ideas, la música para expresar nuestros sentimientos, nuestros estados de ánimo o incluso la música contando una historia, y no precisamente de la que habla la letra de esa canción, sino que existen canciones que las hacemos nuestras y así cuentan nuestra historia, como en la película Alta Fidelidad, las hacemos parte de nosotros para convertirlas en nuestra historia, para contar de forma melódica algo, algo que a veces no podemos decir con palabras, gestos, así que terminamos cantando, escuchando y sintiendo una canción.

Yo y la música, la música y yo, una de mis bellas artes favoritas por excelencia, pero shhhhhhhhhh, no le digan al cine, la fotografía o la literatura, que de mis musas, mi favorita es la música, tanto que de youtube to mp3 todo el tiempo.

Definir la experiencia de vivir la música es muy difícil, porque ella es efímera, no existe, se desvanece antes de terminar, sin embargo a veces esto irreal, se convierte más real que cualquier cosa, sin importar su fugacidad, la música parece ser eterna, no necesitamos verla para sentirla.

Siempre he creído que la música ayuda a conocer a una persona, la música que alguien escucha te está hablando, te está diciendo que siente esa persona, su estado de ánimo e incluso sus más profundos deseos y anhelos; tal vez suene a que estoy exagerando y que si alguien está escuchando Gasolina, seguro no dice nada profundo sobre esa persona, pero todo lo que hacemos y más lo que escuchamos da mucha información sobre nosotros mismos.

La música ayuda a entender como es una persona, cuáles son sus más profundos y oscuros pensamientos, solo hay que poner atención, solo hay que escuchar los acordes de esa canción, la complejidad de la letra o incluso su simpleza, para comprender más a una persona, para entenderla e incluso disfrutarla y ser cómplice de esos sentimientos. Eso o probablemente yo estoy más loca que una cabra.

La música nos ayuda a vivir sin volvernos loco, de hecho hace poco uno de mis más queridos seguidores me mando una reflexión sobre lo que para él significa la música, como una adicción, una droga que lo conecta con el mundo, para sentirse vivo, para sentirse parte de todo e irónicamente fuera de este mundo; vivir la música es una experiencia muy personal que todos sentimos de diferente manera, hay quien para poder expresar todas sus ideas se sienta a tocar el bajo eléctrico o la guitarra acústica, tocando la melodía más bella del mundo, una nunca antes oída por nadie, inspirada en la musa particular de cada quien, hay quienes se sientan a escuchar en su gran sistema de audio, totalmente fiel, a decibeles que podrían dejar sordo a cualquiera su música favorita para relajarse, esa música que ya es parte de su vida; también están los que dedican canciones para decir algo sin decirlo, para conectarse con una persona de una manera profunda y poderosa, para que cada que la otra persona escuche esa canción, recuerde la fragilidad del tiempo y las relaciones.

Ah, la música, que hubiera hecho yo sin ella, que por muchos años ha sido parte de mi terapia de vida, esa música que me ayuda a expresarme, que me inspira y que me permite tener largos periodos de concentración, solo necesito un buen playlist, mis audífonos y subirle al máximo para tener conexión directa con mis ideas y olvidarme del mundo entero.

Supongo que para mí la música, es más que simple música, es más, a veces con una simple canción, claro, escuchando unos buenos acordes de un bajo eléctrico puedo ser feliz, a veces lo único que se necesita para ser feliz es buena música.

Y otra cosa que nunca olvido, es que la música dice de forma clara como me siento o cuales son las dudas que me dan vuelta en la cabeza.