Notas Random

Cuando te sabrosean en la calle

Esa es toda una experiencia de la dimensión desconocida.
Pero espera, espera, espera un minuto y no dejes que tu mente vuele, yo no me quise referir por sabroseada a la acción de manosearte sin tu permiso.

No, yo no hablo de cuando eres manoseado o torteada, que esas también son experiencias de la dimensión desconocida, y, de hecho, hay una campaña muy fuerte para evitar ese tipo de acoso y violencia.
Y es que uno nunca sabe cómo reaccionar a esas cosas, bueno, yo siempre reaccionó de forma violenta y recuerdo la última vez que un pobre idiota decidió que mi trasero le estaba diciendo “tócame”, porque en el momento que sentí como alguien acariciaba mi glúteo, en ese momento algo en mi interior se enciendo, pero no fue pasión, oh no, fue una furia incontenible que me hizo, en ese momento, cuando el camión iba llenísimo, encontrar a ese sujeto y sin decir nada, con solo una mirada el Fulanito decidió bajarse del camión.

Creo que cada quien reacciona de forma diferente a estas experiencias.

Pero yo me refería por sabrosear a la acción de que te griten sabrosa o sabroso en la calle, y decía que es una experiencia de la dimensión desconocida porque te gusta y te halaga, pero al mismo tiempo te hace sentir sucio/a, usado y como un objeto.
Claro, mientras solo te sabroseen, la cosa se queda en ese limbo entre que te gusta y lo odias.

Porque hay que aceptarlo, hoy en día hay tanta guarrada que se escucha por la calle, que hace sea, más bien denigrante en vez de halagador.

Y no es cosa sólo de albañiles y sus piropos sucios, ahora cualquiera en la calle puede decirlas.

Pero cuando te sabrosean, cuando solo te gritan sabrosa, mami o te chiflan, eso va directo a tu ego, y es que el hecho de que alguien te voltee a ver y te considere atractiva, es todo un halago.
Aunque si me dieran a escoger preferiría otro tipo de halagos y piropos, y sin importar lo trillados que puedan llegar a ser, siempre son bien recibidos por el orgullo, la autoestima y el ego.

Así que la verdad yo sí, cuando alguien me grita sabrosa en la calle me sonrojo, claro, cuando no voy distraída, porque si no comienzo a buscar a la chica sabrosa en cuestión y luego me doy cuenta que soy yo, y termino corroborando ¿yo soy la sabrosa?

La verdad es que el que te consideren atractiva es todo un halago, yo sí lo disfruto.

En fin, temas polémicos que generan mucha polémica cuando te sabrosean en la calle.

Yes

Bloguera de hueso colorado desde el 2008. Porqué siempre hay algo que decir yes@elblogdeyes.com