Cuando escuchas una canción una y otra vez

No puedo creer, en serio, hasta yo estoy sorprendida, con la cantidad de veces que he escuchado una misma canción, y sigue gustándome.

Diría mi hermano, ¿Qué onda con tu canción que está en loop infinito?, ya chole, ya me harto.

Pero yo sigo pensando, me encanta esa rola, como para seguir escuchándola, por siempre, y para siempre, hasta que llegue el fin de los días. Y seguro pensarás, no invoques tu destino, porque pasará y la odiarás, se convertirá en un infierno escuchar esa rolita, día tras día, durante cada minuto y segundo de la vida.

A eso debo decir, soy como Homero, esa canción me encanta y tengo prácticamente todo este mes, escuchándola, y sigo con ganas de seguir escuchándola, todo el día; es más, podría irme a dormir escuchando esa canción y lo haría con una sonrisa, porque me pone de buenas, me hace sentir a gusto, alegre y, sobre todo, me permite concentrarme para escribir.

Es la única canción en este mundo, que me permite concentrarme para escribir, y como es lo que prácticamente hago todo el día, es la canción que se ha convertido en mi musa.

Yo podría comer, digo, escuchar feliz por el resto de los siglos, esa canción.

De verdad me encanta, como para reproducirla una y otra y otra vez, y esto es literal, no es metafórico.

No sé cuántas veces la he escuchado, pero si se, que la oigo todo el día, sin cambiarla, sin poner otra canción, es la misma, termina de reproducirse y vuelve a comenzar.

Lo sé, puede sonar a un infierno en vida, una especie de tortura que se escuchará en los momentos más crueles de la vida, o lo que le hicieron al pobre Daryl, los salvadores para quebrarlo.

Pero yo puedo escuchar esta canción una y otra vez.

Seguro alguna vez te ha pasado, y te has obsesionado con una canción, y con el paso de los días, tal vez a la semana te hartas, hasta que encuentras tú canción, como lo hice yo y puedas escucharla siempre.

Creo que lo que más me gusta de esta canción, que por cierto se llama “Otoño sin hojas, verano sin ti”, es que pone mi mente en modo “escritor” y puedo escribir sin parar.